Serie de Cábala del año 89, Clase 12 del 8 de junio del año 1989 dictada por el profesor Santiago Aranegui.
Muy temprano en su vida, Santiago Aranegui se dió cuenta que la espiritualidad era un misterio que necesitaba ser develado, para vivir la vida dentro de ese conocimiento, o saber que la vida era para
"vivirse como se pueda", sin pies ni cabeza, como un caos sin significado.
De niño, un día que estaba enfermo en cama, le pidió a su padre que le trajera un libro Rosacruz, cosa que su padre sin averiguar mucho le trajo de la librería, y eso le ayudó a comenzar la búsqueda de una verdad no religiosa, ya que ni los sacerdotes ni los ministros evangélicos pudieron ayudarle a resolver sus dudas cuando su madre falleció de una dolorosa enfermedad durante la cual era visitada por entidades espirituales que Santiago, de siete años, percibía claramente.
Luego, siendo niño de pantalón corto, en la calle le tiró del saco al maestro Mario Salas, conferenciante rosacruz que llegó a La Habana para dar una conferencia, y le pidió ser admitido en la Orden. A lo cual Mario Salas, según nos contó en una de las clases a que fue invitado, le dijo que era muy chico para ser miembro, pero que él buscaría la manera de que pueda recibir las lecciones, las cuales Santiago atesoró, y fueron de las pocas cosas que pudo traer a Miami cuando emigró de Cuba.
Santiago evolucionó en la Orden Rosacruz y llegó a ser también Conferenciante Viajero, y en sus recorridas por el mundo conoció en Francia, en su Castillo del Silencio, al Imperator francés de aquel tiempo, de la Orden Rosaruz, Raymond Barnard, autor del libro "Mensajes del Santum Celestial", quien le dijo, a principios de los 80s, "Que ha llegado el momento de que el conocimiento verdadero llegara a todas las personas que lo estuvieran buscando, aunque no pertenecieran a la Orden Rosacruz".
A su vuelta a Miami, Santiago comenzó a dar charlas por la radio y en aulas que su pequeño grupo de alumnos conseguía para recibir este conocimiento, aunque solamente compartía la filosofía, sin enseñar rosacrucismo, y lo hacía a un público general, que en cantidad cada vez mayor se acercaba a esta fuente de conocimiento espiritual.
Eso molestó a muchas personas, porque en esos tiempos sólo las religiones creían tener derecho a hablar sobre temas espirituales. Aranegui fue un pionero, único en aquellos años del 80.
Se dio a esta tarea con entusiasmo, en forma desinteresada, dedicando la mayor parte del tiempo libre que le dejaban las clases de arquitectura que enseñaba en el Miami Dade Comunity College, de donde se jubiló algo de 30 años más tarde, sin haber dejado de dar sus clases de espiritualidad ni un solo día, tanto por la radio como en las aulas, donde lo conocí.
Las clases que comparto en www.ivoox.com son del año 1988 y 1989, las mismas que yo escuché cada jueves, y que, no es necesario recalcarlo, le dieron a mi vida su verdadero significado, con una filosofía de vida basada en el proceder correcto, que fue la filosofía que Aranegui aplicó tanto en su vida privada como en la pública en sus clases, en la universidad y en nuestras aulas.
Nota para los interesados en estas clases:
Aunque las clases sean interesantes, y uno quisiera escucharlas todas lo más pronto posible, tanta información inundará la mente y los conceptos dificilmente permearán a la comprensión.
Nosotros escuchábamos esas clases cada jueves, recibíamos el casete que escuchábamos en el auto varias veces más durante la semana, captando en cada escucha detalles que se nos habían escapado en escuchas anteriores, y ese nuevo conocimiento, si era aceptado por nosotros, se iba sumando lentamente a nuestra comprensión e iba formando esta filosofía que tanto nos ha servido en la vida.
Hoy, con mis 85 años, siento que la parte de mi vida que tuvo más sentido fué la posterior al año 1989 en que llegué a conectarme con el Conocimiento espiritual.
Anteriormente, aunque yo pensaba que estaba actuando bien, mi voluntad, como un barco sin timón en medio de la tormenta de la vida, era impulsada hacia un lado u otro, manejada principalmente por las emociones y pasiones del cuerpo físico.
Sigo reuniéndome con condiscípulos cada vez que visito Miami, y estamos todos de acuerdo que las enseñanzas de Santiago Aranegui modelaron nuestro futuro y que la filosofía que nos legó es nuestra mayor riqueza.
Santiago Aranegui dejó su cuerpo el 5 de agosto de 2011, y vivirá eternamente en sus discípulos.
Mi nombre es Edgardo Vidal, y les deseo sabiduría y mucha claridad en la tarea de elegir su futuro. Buena suerte...
Comentarios
Mi eterno agradecimiento a mi amigo Edgardo Vidal. Es es el vivo ejemplo de una persona que a pesar de su edad, esta abierto al crecimiento personal. Gracias a el, miles de personas tienen la oportunidad de oir estos videos y las conferencias que en vida compartio con sus discipulos nuestro Amado Maestro Santiago Aranegui. Muchas Gracias Edgardo, Que Dios Te Bendiga Fernanda Guerrero
Buenos días Sr. Edgardo Vidal, quiero agradecerle infinitamente ésta información, soy estudiante rosa-cruz desde hace algunas semanas, aprecio extremadamente la sabiduría que contienen éstos audios del Gran Maestro Aranegui a quien yo no habría conocido de no haber sido por usted, deseando y anhelando encontrar el camino místico en mi vida el cósmico permite que los senderos se abran, gracias nuevamente y mis mejores deseos de paz profunda.