Cuando en el otoño del año 1990 entraba yo apresurada en el Salón del Ayuntamiento de Córdoba con mi indumentaria estilo Mary Poppins, bolso de viaje incluido, nadie nos dijo a José Ramón y a mí que surgiría una amistad de esas sinceras, intensas, permanentes e incondicionales de las que alimentan no solo el intelecto, sino el alma y el espíritu. Nadie nos lo dijo, pero pasó. Ya se ha convertido en una larga andadura de 26 años de risas, de cre-acción (creación y acción), de proyectos, de excursiones, viajes, cocina, diseño, estudio, acompañamiento vital en momentos cruciales y trascendentales... en fin, reseñas de vida, consideraciones del intenso camino recorrido juntos, en ocasiones de forma individual y otras, ahí revueltos. Lo mucho acontecido y el grato recuerdo por tierras andaluzas.
Veinte años no es nada, lo dice un tango, pero casi treinta, en una vida dedicada a la Educación Social cuando todavía no se llamaba así y ni siquiera sabíamos que lo que hacíamos tenía ese nombre, sí que marcan y, más todavía, si transcurre en una nación como la nuestra, la nación andaluza de Blas Infante. Desde luego, años más que suficientes como para hacer cualquier tipo de balance o comentario con la siempre inapreciable ayuda que favorece la perspectiva del tiempo. Yo, por si acaso, que quedaré con alguna de las múltiples cosas que me gustan de José Ramón, pidiéndole que no deje nunca de regalármelas con la generosidad con lo que lo hace: la risa fácil gaditana, la agudeza y rapidez mental, la buena conversación y la sororidad... sí, la sororidad, porque aunque este término se usa solo entre mujeres, la solidaridad incondicional de mi amigo para conmigo y otras mujeres, ha cruzado hace tiempo la frontera que le otorga el título de feminista.
Nuestro invitado, José Ramón González de Rueda y Ruíz, es Educador Social, también Trabajador Social y Licenciado en Geografía e Historia. y aunque siempre ha estado militando de forma activa en el mundo asociativo (fue miembro fundador de WASLALA Animación Sociocultural y de la Asociación de LGTB DeFrente), estos últimos años está volcado, más allá del ejercicio de su profesión como Educador Social de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía, en el desempeño de su cargo como Vicepresidente y Responsable de Formación del Colegio Profesional de Educadoras y Educadores Sociales de Andalucía.
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