Has elegido rechazar las cookies basadas en consentimiento que utilizamos principalmente para gestionar la publicidad. En adelante, para acceder a nuestra web tienes que elegir alguna de las siguientes opciones.
Premium
3,99 €/mes o 39,90 €/año
Sin publicidad y mucho más
Plus
Por 9,99 €/mes
Contenido exclusivo y sin publicidad
Si has cambiado de idea, puedes aceptar las cookies y continuar usando iVoox de forma gratuita.
Con tu consentimiento, nosotros y nuestros 813 socios usamos cookies o tecnologías similares para almacenar, acceder y procesar datos personales, como tus visitas a esta página web, las direcciones IP y los identificadores de cookies. Algunos socios no te piden consentimiento para procesar tus datos y se amparan en su legítimo interés comercial. Puedes retirar tu consentimiento u oponerte al procesamiento de datos según el interés legítimo en cualquier momento haciendo clic en ''Obtener más información'' o en la política de privacidad de esta página web.
Nosotros y nuestros socios hacemos el siguiente tratamiento de datos:
Almacenamiento y acceso a información de geolocalización con propósitos de publicidad dirigida, Almacenamiento y acceso a información de geolocalización para realizar estudios de mercado, Almacenar la información en un dispositivo y/o acceder a ella , Datos de localización geográfica precisa e identificación mediante análisis de dispositivos , Publicidad y contenido personalizados, medición de publicidad y contenido, investigación de audiencia y desarrollo de servicios , Uso de cookies técnicas o de preferencias.
Comentarios
Parece que pudiera ser que se abriesen puertas inter dimensionales en algunos lugares predispuestos, esos lugares encantados o que por alguna razón aparente y de una conformidad muy superior a la nuestra, aquí en la Tierra se encamine una labor u obra Divina - de esas preciosas energías espíritus blancas - para inmortalizar y cargar energéticamente ese ambiente, ámbito o sitio elegido. Jesús Callejo nos deleita igualmente con este asunto de las reliquias providenciales que, sin saberse cómo han quedado en el lugar precioso y preciso, que no se puede hacer o llegar a entender la causa de la empresa adjudicataria. Nos arremete en que todo está ahí y que debemos elevarlos a nuestra propia atención suprema, debemos entrar en esos lugares o sitios cargados de fuerza mayor intensificando al máximo posible toda nuestra atención e interés. A mí me encanta, me entusiasma, me eleva, me gusta, me interesa, me reconforta, me fortalece, me engrandece, me relaja y condiciona todo este asunto del que nos habla Jesús, me noto y presiento que forma parte de mí naturaleza. Estos apartados, espacios o programas radiofónicos deben ser tenidos en cuenta porque la gente lee muy poquito y no llegan a acceder a estas cosas, a estas riquezas.
Esas Voces del Misterio siempre han estado, han existido, se habrán quedado infinidad de veces vagando por el espacio y el tiempo, o incluso algunas se han dejado escuchar directamente por individuos que quedarían boquiabiertos y atemorizados; eran otros tiempos y el descubrimiento de instrumental para soportar grabaciones aún estaba a años luz de distancia de poderse ni tan siquiera hacer realidad su imaginación. Pero en lugares religiosos, como en las iglesias, conventos o monasterios, derruidos ya por el abandono y el implacable paso del tiempo alguien, que siglos atrás pasaba a su interior habría podido escuchar Cantos de monjes Gregorianos, de monjas de clausura o de diferentes órdenes religiosas cantando, etcétera, y quedaba simplemente ahí, con esa o con esas personas, con sus propias y particulares experiencias y sin tener o disponer de la forma de hacer llegar esa realidad de las psicofonías vividas a nadie más, como una especie de prueba factible. Desde que tenemos las primeras grabadoras, ya antiguas como esas de bobina continua - pero demostrado ha quedado que han llegado a ser los mecanismos primeros en captar las primeras y más conocidas psicofonías registradas en la incipiente historia de La Transcomunicación Instrumental; caso indispensable en nombre de este hecho primero nos lo dispensó en la primavera de Mil novecientos cincuenta y nueve Friedrich Jürgenson, cuando pudo disfrutar de la captación de la voz psicofónica de su propia madre; se le filtró o coló fortuitamente entre unas pruebas de captación de sonidos de pájaros en un bosque, y ahí radica el comienzo de todo. Gracias Siempre José Manuel por traernos estas informaciones sin fecha de caducidad ni calendario, de Calidad Extra y de necesaria e imperante obligación de ser rememorada.
Jesús, puede usted repetir, comenzar o hacer lo que desee, siempre es bienvenido y esperado. J.A. Cebrián... forma parte de nosotros.
*NO SE PERMITIRÁN COMENTARIOS OFENSIVOS NI DESPECTIVOS.