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Comentarios
Me ha encantado, el papel social de la paella es exactamente el mismo que el del asado acá en Argentina.
Como siempre un placer escuchar tus podcast, muchas gracias por hacernos recordar esos momentos familiares uniendo la gastronomía con recuerdos felices.
Muy interesante y Pepa super agradable
Que bonito, cuánto he aprendido. tengo que probar a hacer arroz al horno. Otro fantástico audio
Distinguido señor, muchas gracias por este muy grato recuerdo, usted ha traído de regreso la deliciosa paella que preparaba mi hermano Gerardo Olvera, QEPD, en el pueblo de Acámbaro, Guanajuato, no sé cómo darle valor a su podcast, pero este recuerdo vale oro, y en ese nivel se lo agradezco. La paella es como dos buenos paisajes de mi memoria, su sabor y la muy grata compañía de mi hermano, mi madre y la familia que venía a casa desde otros lados del país, a disfrutar la comida, comentar las novedades de su vida y, lo mejor de todo, recordar los buenos momentos de cuendo se celebraban las navidades y las vacaciones de fin de curso... Inolvidable... Mi agradecimiento y un cordial saludo.
Imprescindible el MANUAL PARA COMER LA PAELLA VALENCIANA ENTRE AMIGOS. 😄 Si come de la Paella, Vd. debe saber: La paella es como una caja de quesitos en porciones. Los jugadores están distribuidos alrededor de la paella de forma equidistante. A cada jugador le corresponde solo el quesito que tiene delante de sus narices. El cubierto oficial del juego es la cuchara de madera o metal. Si el jugador quiere exprimir limón en su área, deberá tener autorización verbal de sus dos vecinos, a los que procurará no salpicar. El juego comienza cuando el macho dominante de la manada dice "Vinga que es gela l'arròs!" (Tr.: ¡Venga, que se enfría el arroz) Si la paella está buena, el elogio al cocinero se hará de forma intermitente cada dos cucharadas durante toda la comida. Los tropezones que hay en cada sector son propiedad del jugador titular de ese espacio. Si algún elemento integrado en su zona no es del gusto del jugador lo depositará delicadamente en el centro de la paella para que lo disfrute otro jugador. Las piezas de carne cuando salen de la paella no pueden volver, ni por partes, ni en los huesos. Si alguien invade el espacio de otro jugador sin permiso, será amonestado, a la segunda oirá aquello de "eres un poc fill de puta" (Tr.: Eres un poco malandrín) y tendrá que pagar los carajillos. Se entiende que un jugador abandona, cuando apoya la cuchara en el borde de la paella y dice "Estic fart, ja no puc més!" (Tr.: Estoy harto, no puedo más) En ese momento su zona queda franca y puede ser ocupada. Queda terminantemente prohibido girar la paella para acceder a otro punto donde aún queda arroz. Si la paella baila alguien deberá coger del asa para estabilizarla. El/los jugador(es) que se ocupen de este cometido recibirán elogios del resto, que se emplearán a fondo para mantener siempre llena la copa de vino del esforzado estabilizador durante toda la comida. Cuando se toca hierro con la cuchara, en las postrimerías de juego, los valencianos se enfrentan al "Socarrat", es un momento glorioso donde el nerviosismo cunde. El frenesí es tal, que aquello parece una prospección petrolífera. Los que no participan en el festín deben relajarse y esperar el postre. La partida acaba cuando los jugadores se retiran o ya no queda nada en la paella, señal indiscutible que estaba buena o había mucha hambre.
bien... muy bien... otro "palo" diferente y brillante como siempre. A seguir aso
Me has hecho rememorar los domingos que pasábamos la familia alrededor de todo lo que conlleva hacer una paella, desde hacer el fuego a leña de naranjo que le da un sabor especial, hasta cuando los más pequeños íbamos a buscar el romero para hacer una fina capa encima del arroz y dejar q se repose y se obtenga un aroma especial. Es cierto que la paella es compartir y unir , además de enseñar desde la más tierna infancia que son importantes las tradiciones.Gracias
muy bonito, de algo tan sencillo se puede sacar un bonito y entrañable tema. Felicidades también para la señora que colabora, nos ha dado una master clas de antropología de la paella gracias Fernando. no desaparezcas nunca
Muchas gracias por el tiempo que dedicas al podcast, escucharlos es un placer. Después de escuchar este voy a reunir a mi familia el próximo domingo a tomar una paella😊😊😊