* Pensando en voz alta; noticias, medios, idealismo *

• Gilgamesh
• Jue, 23/11/17 20:25

Mithila; ¡muchas gracias!, abrazo.

• Mithila
• Mié, 22/11/17 23:14

Gilgamesh, creo que tomaste una muy buena decisión dejando los estudios y encontrando finalmente a este otro tipo de periodismo más efectivo y veraz. Hay mucha gente por ahí con una buena capacidad de manipulación a través del intelecto y la comunicación pero con nula sabiduría. Lamentablemente muy a menudo no va junto. En estos tiempos de Internet, podemos alegrarnos profundamente de tener nuevos recursos para hacer las cosas a nuestra manera y llegar a quienes queremos llegar. ¡Un abrazo!

• Gilgamesh
• Mié, 22/11/17 18:18

Mithila; wao..gracias por compartir tu experiencia en los medios, salvando las distancias y diferencias de cada país puedo coincidir plenamente con tu relato. A mí lo que me espantó fué la Licenciatura en Comunicación Social, allí entendí que se forman máquinas humanas...que lamentablemente en lugar de trabajar para el lado positivo pues...todo lo contrario, salvando honrosas excepciones. El nivel de formación es tan vasto y abarcativo que un Comunicador que concluya la carrera de 5 años está capacitado para ...manejar el mundo...así literalmente. Gran parte de gente que trabaja en los *medios* como periodistas, locutores, presentadores, etc, no cursan esa carrera ya que suelen elegir esas especialidades por separado, gran razón para poder detectar en ellos el escaso nivel intelectual. Pocos que terminan la carrera son visibles pues trabajan para empresas, instituciones, y en la política mucho más, el nivel intelectual es elevadísimo...y asusta cuando se puede probar que un Comunicador así, al servicio de malas causas...es realmente un arma de destrucción masiva, afortunadamente tengo un familiar que se reveló y que por fuera de esos ámbitos pone la Comunicación al servicio de la gente como debe ser. En mi caso huí...y no terminé la carrera, pero desde mi incompletitud intento también comunicar desde otros parámetros que como verás, nada tienen que ver con lo convencional. Muchas gracias por compartir Mithila, abrazo.

• Gilgamesh
• Mié, 22/11/17 18:03

Nefer-benitocamelo; gracias.

• Mithila
• Mié, 22/11/17 16:00

Trabajé un par de años en la redacción de un periódico de gran tirada. Fue una experiencia tan decepcionante que tardé tiempo en digerirla. Al principio habían días en que me caían las lágrimas muy a menudo con la fealdad moral que tenía que llegar a ver. El primer día que empecé a trabajar, un autocar lleno de niños se había despeñado por un precipicio. Fue durísimo ver a aquellas personas sin la más mínima empatía, como buitres tras la noticia. Vi en lo que acababan los periodistas actualmente. Por un lado estaba el mal ambiente evidente entre los compañeros. Un ambiente extremadamente competitivo. No hay plazas en prensa escrita para muchos periodistas en total, así que hay que dar imagen de persona informadísima y más inteligente que los demás. Nunca en la vida había visto gente tan soberbia. Pronto me di cuenta de que se sentían grandes por estar contratados por el periódico, como habiendo llegado a la cúspide de su carrera. Pero yo pensaba: estas personas en realidad están todo el día haciendo redacciones como las que te obligaban a hacer en el colegio. Un total aburrimiento de trabajo. Nada de los reporteros que uno imagina. Del edificio no salía casi nadie para nada. Era el año 92. Su fuente de noticias en aquel entonces eran los teletipos de las agencias: Reuter, Efe... Supongo que aún debe funcionar igual, aunque ya no llegará por teletipo sino por Internet. Yo estaba de ayudante de redacción y era la persona que se ocupaba de recoger los teletipos varias veces al día y repartirlos en función de las temáticas. Pude seguir durante todo el tiempo que trabajé allí qué noticias eran las que se seleccionaban. Como las podía leer todas, me escandalizaba que jamás elegían buenas noticias. Jamás: literalmente ¡Y llegaban muchas! También podía constatar cómo manipulaban las noticias, porque yo veía las originales. Para mi, aquello significó un aterrizaje a una realidad que uno imagina muy diferente. De más de 100 personas, después de muchos meses trabajando allí conocí a no más de 10 personas realmente humanas. Los demás, lamento decirlo, eran personas muertas internamente. No digo que no puedan reaccionar en la vida. Quizá cuando el periódico cerró muchos pasaron por una crisis que les ayudó a ser mejores personas. Espero que fuera así y que tuvieran la oportunidad de reaccionar. A algunos los veo ahora en otros medios y me cuesta no mirarlos con cierto escepticismo. Actualmente no miro la televisión y leo pocos medios escritos. Para qué… Internet me permite encontrar la manera de mantenerme mínimamente informada.