El auto sacramental es un género teatral consecuente con el ideario y los tiempos de la Contrarreforma (siglos XVI y XVII), cuyo máximo exponente se recoge en este audio: "El gran teatro del mundo", de Pedro Calderón de la Barca (publicado en 1655).
El género, como tal, nació a partir de la representación que se hacía el día de Corpus para exaltación de la Eucaristía. Supuso la creación de un nuevo género, como digo, que combina componentes alegóricos con características de una obra dramática. Su fin era claro: evidenciar la mejor doctrina cristiana o una enseñanza moral, siempre ortodoxa, por supuesto.
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EL GRAN TEATRO DEL MUNDO: ARGUMENTO
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La obra comienza con una invocación solemne del Autor (¿Dios?) al Mundo, que es personaje también, para después ir presentando a los protagonistas: el Pobre, el Rey, la Discreción, la Hermosura, el Rico, el Labrador y un Niño. Luego el personaje del Mundo les da unos atributos característicos, por ejemplo al Pobre no le entrega nada, al Rey púrpura y laurel, al Labrador un azadón, a la Hermosura un ramillete de flores, al Rico joyas o a la Discreción cilicio y disciplina.
Después cada personaje realiza su papel en el mundo, en un escena en la que el Pobre pide limosna y cada personaje reacciona según corresponde a su condición social o moral, por ejemplo el Rico no se la da; el Labrador tampoco, pero le dice que se ponga a trabajar para conseguir lo que busca; el Rey delega en uno de sus ministros y la Discreción le da pan del cielo.
La siguiente escena representa el momento de la muerte. Una voz les ordena a los personajes abandonar el mundo y les indica que su papel en el mundo ya acabó, estos salen por la puerta del ataúd y posteriormente el Mundo les manda devolver sus atributos, aunque no todos pueden hacerlo, por ejemplo la Hermosura no le puede devolver la belleza porque es algo que se pierde con la muerte.
Finalmente, según sus actuaciones, el Autor manda a cada personaje a donde se merece. El Pobre y la Discreción van al cielo, porque han actuado correctamente; la Hermosura, el Rey y el Labrador al purgatorio, porque serán juzgados más adelante; el Niño como no llega a nacer no es enviado a ningún sitio y el Rico es enviado al infierno.
Fuente: Archivos RTVE.
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