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Comentarios
Estoy de acuerdo en que Lenin y Stalin son hijos legítimos de Marx. Al igual que, por el otro extremo, la socialdemocracia más acomodaticia también lo es. Es decir, que el pensamiento de Marx, interpretado desde diferentes prismas, puede tomarse para legitimar las prácticas políticas más dispares. Efectivamente, ocurre igual con el anarquismo: tanto "los reyes de la pistola obrera" como los "ministros burgueses" tipo Montseny se pueden reclamar de esa corriente. Pero esto ocurre con cualquier cosmovisión que haya dejado su impronta en la historia: el cristianismo, sin ir más lejos, también ha servido de base para prácticas tan dispares como son las Cruzadas y la Inquisición, por un extremo, y las misiones y Cáritas, por el otro. Pero claro, un crítico del cristianismo que utilizara la misma vara de medir que tú utilizas con el marxismo podría afirmar que las Cruzadas y la Inquisición son consecuencia necesaria de la doctrina cristiana (y podría echar mano de argumentos como que el monoteísmo lleva al dogmatismo, etc.). Desde mi punto de vista, las principales causas de las Cruzadas y de la Inquisición son históricas, y no doctrinales. Del mismo modo, las principales causas de los regímenes comunistas totalitarios también son históricas, y poco tienen que ver con que Marx dijera esto o aquello. Pero es que, además, cuando Marx teoriza sobre la "dictadura del proletariado" está pensando en algo que nada tiene ver con lo practicado en Rusia, China, Cuba... En definitiva, si a los cristianos actuales no les afeamos su doctrina echándoles en cara las Cruzadas y la Inquisición, tampoco deberíamos afear la doctrina de los marxistas actuales por lo que otros hicieron en nombre de dicha doctrina en el pasado (y en unas circunstancias históricas muy determinadas, además).
Solo en parte tienes razón. Quien primero defiende la dictadura del proletariado es el propio Marx y, aunque Lenin y Stalin pudieron traicionar ideales planteamientos de Marx, son hijos legítimos que continúan ideas básicas presentes en Marx. La oposición entre anarquistas y marxistas se dio en vida de los dos grandes, Marx y Bakunin. Como siempre, algo hubo de cruce de egos, pero no solo. Son dos enfoques bien distintos y todos eran conscientes y lo siguieron siendo en las décadas siguientes. Y desde luego, cuando hubo enfrentamientos, ningún lado tuvo piedad del contrario, aunque quienes más masacraron al contrario fueron los marxistas (Kronstad, Machno, Mayo 1937...). Ciertamente esto no quita para reconocer las positivas aportaciones de Marx. Por otra parte, no lo dudes. El pistolerismo es hijo letítimo del anarquismo, y también suelo criticar esa tendencia al pistolerismo, con un personaje emblemático del anarquismo español como fue Durruti, experto en el uso de la violencia. Nunca fue un buen ejemplo para mi y solo cito su brillante frase del mundo nuevo en nuestros corazones. Los anarquistas han, hemos, pagado un alto precio por esa tendencia que sigue presente entre nosotros.
Félix, en las obras de los teóricos marxistas, y particularmente en Marx, también abunda la temática bíblica. Te recomiendo el libro "Las metáforas teológicas de Marx", de Enrique Dussel. Por otro lado, me gustaría decirte, otra vez, que tus opiniones sobre el marxismo parten siempre de una falacia: hacer pasar por marxismo (como doctrina) lo que no es más que práctica política de determinados marxistas que vivieron en el pasado. Así, dices en el audio que "el marxismo" (sic) promete la dictadura del proletariado y de ahí viene la opresión. Si hilaras más finos tus argumentos sobre el marxismo, deberías haber dicho: la práctica política de los marxistas rusos, chinos, cubanos... acabó generando un sistema opresivo, pero dicho sistema no es el que preconiza el marxismo como doctrina. Al no hacer esa diferenciación me parece que cometes, que sigues cometiendo, una injusticia. Porque... partiendo de la falacia de la que tú partes, yo podría afirmar que el anarquismo (como doctrina) promete el paraíso en la Tierra y de ahí vienen el pistolerismo y las bombas... Supongo que, si me escucharas esa sandez, tú me responderías: no, no confundas, una cosa es la doctrina y otra la práctica política (terrorista) de ciertos anarquistas en el pasado. Un saludo. Por cierto, a pesar de esta discrepancia, siempre es un placer escucharte.