Así como lo oyes, ayuda a alguien hoy. Que parece un mensaje de una organización benéfica, pero que curiosamente nos puede ayudar también mucho a nosotros mismos. Así que ¿qué mejor que ayudarnos ayudando? De entre todas las ideas que hemos comentado en los lunes de estos 5 últimos meses, quizás sea la que os suena más extraña pero a la vez es una de las más eficaces.
Ver en iTunes · Ver en iVoox · Ver en Spotify Enlaces y notas del episodio Página de podcasts
Página del blog
Todos los cursos
Registro en los cursos
Formulario de contacto para feedback
Facebook de Coaching De Músicos
Aprender enseñando, episodio 62
Transcripción del episodio completo: ¡Ayuda a alguien hoy! Muy buenos días! Bienvenidas y bienvenidos a Coaching De Músicos
… el podcast en el que hablamos sobre conceptos, hábitos, técnicas, estrategias, conductas, habilidades y competencias del coaching pero enfocadas esta vez a la enseñanza musical y la vida del músico en general.
Porque sí, ¡los músicos también tenemos vida! Y aunque a veces se nos olvide, detrás de cada instrumento hay una persona! Así que vamos a dedicar un poco de tiempo cada día a hablar de esa persona, a hablar de ti: de tus necesidades, aspiraciones, deseos, ambiciones, valores, creencias, miedos, frustraciones… y todo lo que esté en nuestra mano. ¡Esto es Coaching De Músicos!
Hoy es lunes 11 de febrero de 2018 y este episodio número 116 es muy directo. Así como lo oyes, ayuda a alguien hoy. Que parece un mensaje de una organización benéfica, pero que curiosamente nos puede ayudar también mucho a nosotros mismos. Así que ¿qué mejor que ayudarnos ayudando? De entre todas las ideas que hemos comentado en los lunes de estos 5 últimos meses, quizás sea la que os suena más extraña pero a la vez es una de las más eficaces.
Pero antes, dejadme que os recuerde que toda la información, el podcast, el blog, las sesiones, los cursos online y todo lo que necesitéis, lo podéis encontrar en CoachingDeMúsicos.com.
Con ganas de que lleguen los próximos días en los que por fin vamos a dejar todos los cursos terminados y preparados para empezar a pensar en el siguiente. Otra idea que me habéis enviado: “Técnicas para mejorar la concentración”. Que se suma a la propuesta de “hablar en público”, y a la de hábitos productivos y alguna más. Tendremos que ponernos a decidir pronto, ¿verdad?
¡Cómo me gusta empezar los lunes con vosotras y vosotros! En esta ocasión, como sabéis, para comentar algunas de esas cosas que aquí presentamos como consejos, que están planteadas desde ciertos conceptos que utilizamos en coaching, pero que simplemente quiero que probéis o que tengáis en cuenta, sin darle más vueltas a nada relativo a coaching, estrategias o técnicas. Simplemente probadlo o planteadlo a ver si os cuadra.
Y hoy vamos a hablar concretamente de algo que si ponemos en práctica hoy mismo ya estaremos adelantando mucho, porque hablamos de ayudar a alguien. Pero si empezamos ayudando a alguien en realidad nos estaremos ayudando mucho a nosotros mismos. Esto suena a que el Karma nos devolverá todo el bien que hemos hecho. Que no digo que no. Pero hoy no vamos a hablar desde ese punto de vista.
Cuando digo “ayudar a alguien” también me estoy refiriendo a “enseñar algo a alguien” o “dedicar un poco de tiempo a alguien”, a algo que necesite, a prestarle atención…
Hay muchos artículos que podríais encontrar si buscáis por ejemplo en Google “beneficios de ayudar a los demás”. Y como os decía, muchos de ellos hablan de que cuando das algo bueno recibes algo bueno. De que llenas tu vida de luz y de paz. Como es decía antes, relacionado con el Karma, el bienestar o la energía que transmites y que recibes.
Seguramente de las personas que estáis escuchando habrá personas más o menos creyentes (en religiones, me refiero) y personas más o menos cercanas a esta idea del Karma.
Por eso lo que vamos a intentar hoy es ver los beneficios objetivos de ayudar a los demás, dedicarles tiempo o enseñarles algo. Los que no tienen tanto que ver con creer en algo o en alguien si no con lo que efectivamente podemos ver que pasa cuando lo hacemos. Y de paso, si encontramos algunas relaciones con aspectos que hemos tratado hablando de coaching, mejor que mejor.
Mejora nuestra relación con los demás Lo primero que podemos hablar, y esto no hay que ser ni muy genio ni muy creyente para verlo es que ayudar a los demás mejora nuestra relación con los demás. Ya no se trata de que el Karma nos devuelva lo bueno que hemos dado, sino que directamente todo el mundo está más dispuesto a ayudar o a ofrecer algo positivo a una persona que saben que siempre ayuda y ofrece lo mejor de sí.
Seguro que habéis tenido compañeros o compañeras en vuestra etapa como estudiantes que siempre estaban dispuesto a ayudar, enseñar, aconsejar o dar todo lo bueno que pudieran… y otros que no. Y efectivamente, ¿a que todos queríamos más a los que nos ayudaban?
Esto es más que evidente. Además de paso estaremos mejorando nuestras habilidades sociales, así que pasemos al segundo de los beneficios, ya directamente centrado en nosotros:
Mejora nuestro autoconcepto y nuestra autoestima Si nos miramos desde fuera y nos damos cuenta de que somos ese tipo de persona que nunca ayuda a nadie, que siempre piensa egoístamente y va a lo suyo… bueno, si somos ese tipo de persona posiblemente no hagamos el ejercicio de mirarnos desde fuera, o si lo hacemos seguramente no damos importancia a estas cosas que os cuento hoy. Pero en todo caso, si lo hiciéramos, no parece que ese tipo de persona nos fuera a gustar mucho.
En cambio, todo el mundo, incluso nosotros, queremos más a las personas que ayudan, que se preocupan por los demás y que dedican su tiempo al bienestar de otros. Así que nuestro concepto de nosotros mismos va a mejorar y vamos a juzgarnos mejor. Y esto hace que nuestra autoestima también suba.
Además tenemos la sensación de estar siendo útiles. Y sentirse útil es una de las cosas que más sube la autoestima.
Nos sentimos satisfechos y realizados Por no hablar de la satisfacción y de lo bien que nos hace sentir saber que estamos ayudando o haciendo algo bueno por los demás. Incluso en muchos casos nos hace sentir más realizados.
Somos más agradecidos Otra de las cosas que positivas es que nos damos cuenta realmente de lo que cuesta esa ayuda que estamos prestando o ese tiempo que estamos dedicando a ayudar o enseñar a alguien. Por tanto también vamos a ser más agradecidos cuando alguien lo hace por nosotros.
Esto pasa muchas veces entre músicos cuando tenemos la ocasión de ser profesores o de simplemente ayudar a alguien con una obra o un pasaje que está estudiando. Ahí nos damos cuenta de que nos tenemos que esforzar, escuchar, pensar bien lo que vamos a decir para ayudar a esa otra persona… Y posiblemente cuando es al contrario valoramos más esa figura de profesor o profesora que nos ayuda a avanzar. Y si encima es una ayuda que nos prestan (entre comillas) “sin tener por qué hacerlo”, aún lo agradecemos más.
Hasta aquí lo obvio Vale, hasta aquí lo que puede parece más obvio o lo que simplemente cualquier persona podría decir sobre este tema. Pero ahora os voy a contar un par de cosas más que quizás no os resulten tan obvias.
Reduce el estrés ¿Qué os parece si os digo que ayudar a los demás ayuda a reducir el estrés? Bueno, me diríais que parece mentira que no haya gente más dispuesta a ayudar en este mundo en el que todos y todas estamos todo el día estresados. ¿O quizás si nos ayudáramos un poco más estaríamos menos estresados?
Porque ya hay bastantes estudios que afirman que cuando ayudamos, enseñamos o hacemos algo que es bueno para otra persona, nuestro cerebro libera ciertos neurotransmisores como la oxitocina, la dopamina y la serotonina (que seguro que ya conocéis), y que no solo ayudan a contrarrestar el estrés, sino que te hacen sentir una sensación de relajación y tranquilidad.
Lucha contra la depresión Y estas hormonas estarán ayudando también a disminuir algunos de los síntomas físicos y psicológicos de la depresión, como la apatía, la fatiga o el insomnio.
De hecho, una de las cosas que habitualmente se hace cuando una persona entra en depresión es intentar hacer que vaya como voluntaria a cualquier acción social que pueda serle de interés. Y desde ahí empezar a sentirse una persona útil, subir su autoestima y remontar poco a poco.
Aprender enseñando ¿Y si lo que hacemos es enseñar? Si nuestra acción para ayudar a los demás es enseñar algo que sabemos, bueno de esto ya hemos hablado: siempre se aprende mejor enseñando. Los conceptos se fijan mejor, se verbaliza la explicación de eso que enseñamos e incluso se descubren razonamientos que no habíamos tenido en cuenta.
Ya dedicamos un episodio entero a hablar de esto, en concreto el número 62, que os dejo enlazado en las notas del episodio.
Y en todo caso, siempre siempre aprendemos algo nuevo cuando tratamos con alguien, le dedicamos tiempo y le ayudamos en lo que podamos.
Conclusión O sea, que resumiendo ayudar a los demás, enseñar lo que sabemos o dedicar tiempo a alguien que lo necesita mejora nuestra relación con los demás y desarrolla nuestras habilidades sociales, nos hace sentir mejor con lo que ayuda a mejorar nuestra autoestima, nos sentimos útiles y realizados con lo que también nuestra autoconfianza sube, y de paso estamos luchando contra la depresión y el estrés. Además de todo eso aprendemos más y mejor.
Y ¿sabéis lo mejor de ayudar a alguien? Que podemos hacerlo. Con muy poco esfuerzo. Hoy mismo podríamos dedicar un poco de tiempo a ayudar a un compañero que está un poco atascado con un pasaje, o ayudarle a mover unos instrumentos de una sala a otra (bueno, esto es típico de percusionistas), podríamos pasar más tiempo con una persona cercana que necesita compañía, podríamos enseñar a los demás algo que hemos aprendido últimamente.
Y no nos costaría nada. En cambio, aparentemente ganaríamos mucho. ¿Parece una buena idea, no?
Pues ahí lo dejo para que cada uno y cada una piense en ello y vea si le es aplicable y podría ponerlo en práctica hoy mismo.
Y después de todo esto, ayudadme un poco a mí, contadme qué os ha parecido este episodio. Porque como sabéis, “todo esto solo tendrá sentido si es exactamente lo que vosotras y vosotros queréis”.
Así que espero vuestros comentarios, ya sea en Facebook, en las reseñas de iTunes, en los comentarios de iVoox o directamente en coachingdemusicos.com/contactar.
Mañana volvemos como cada día con un nuevo episodio a partir de las 7:11 de la mañana.
Y hasta entonces, ¡MUY BUENOS DÍAS!
Comentarios