278. Sobre la muerte
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Buenas noches Álvaro! ¿Sabes cuándo escuchas a alguien y tu interior reconoce verdad en lo que te transmite esas palabras? Pues eso, es lo que he sentido al escucharte hoy en este audio. Tu forma de enlazar ideas sobre el fundamento de la pura lógica es tranquilizadora y, es que es así, todo lo que esté fuera de la pura lógica no es real, no es verdad. Saludos!
Hola José Luis, bonita historia, hasta el momento en el que el señor del pelo blanco te juzga y te manda al fuego. Eso es un poco duro de aceptar...Abrazo.
Después de morir, en lo que se refiere a la experiencia de un individuo, es una película tal que; te despiertas años, siglos después y tienes una sensación extraña de desorientación, empiezas a mirar a tu alrededor y ves que estás dentro de un sepulcro en un cementerio, pudiendo ver que tu tumba está abierta y puedes ver tu propia lápida, esto genera una gran confusión y desorientación, ya que no recuerdas como llegaste ahí, simplemente moriste y te enterraron. Cuando echas un vistazo alrededor del cementerio ves que hay otras tumbas abiertas y otras personas en tu alrededor en situación similar a la tuya, de repente escuchas unos pasos y ves a un ser de más de dos metros de altura, con cabellos dorados y cara iluminada, vestido de blanco, ese ser se acerca a otra tumba y la abre, pudiendo ver como aparece de debajo de la tierra otra persona como tu, con ropa bastante antigüa. Al fondo se describe una luz inmensa desde el cielo y se ven a varias personas ascendiendo al cielo por esa luz, como si fueran absorbidos por la misma. Una mano se posa sobre tus hombros, te empiezas a elevar y tu también vas hacia esa luz en el cielo, es este ser de luz abrumadora el que te ha rodeado con sus brazos por la espalda, el cual expande unas alas y comienza a volar, llevándote hacia la luz, te quedas paralizado y muerto de miedo, mientras sobrevuelas hacia esa luz. Al llegar a la luz te encuentras con un terreno árido y rocoso, desde lo alto ves filas inmensas de gente que se dirigen a un destino, según vas descendiendo puedes comprobar como en esas filas hay gente llorando y lamentándose, aterrorizadas. Cuando aterrizas te ponen en una fila, delante de ti hay personas golpenado su cabeza con sus manos y llorando amargamente, le preguntas a la personas de delante, y te dice, vamos a ser juzgados, juzgados por el anciano de Días. La fila va avanzando y ves a lo lejos un gran trono en lo alto, tiempo después vislumbras a un anciano con el pelo blanco y a otro ser más joven sentado a su derecha. Tras unas horas de espera, un ser de luz te dice que pases frente al trono, al acercarte caes de rodillas y ves de cerca a estos seres, el del pelo blanco abre un gran libro, por tu cabeza empiezan a pasar imágenes de toda tu vida y situaciones incomodas en las que hiciste mal a la gente. Tras visualizarlas, escuchas una sentencia, "Tu nombre no figura en el libro de la vida, eres pues declarado culpable", dos seres de luz te sujetan por debajo de los hombros y te arrojan a un lago de fuego incandescente, a pesar de tus lamentos y lloros. Este fue el final de un ateo que obró mal en vida. No muy lejos de ahí existe otra fila, que va hacia el eterno y glorioso Reino de Dios, de los que pasaron el Juicio.
Estoy de acuerdo contigo Anónimo, la presencia de la muerte nos enseña a vivir. Abrazos para ti.
Me ha gustado tu audio Álvaro..y en lo personal digo que la muerte me enseñó a vivir. Y se trata precisamente de lo que dices.. estar presentes..y soltar el resto..aveces más difícil que otras..pero posible..abrazos
Me parece acertadísimo este audio en especial. Sigo todos los que publicas. Este me ha dejado muy pensativo. Si la máquina da vueltas, es que tocas puntos clave, cicatrices abiertas que necesitan sanar. Felicidades Álvaro
Muchísimas gracias a ti Juande. Estoy de acuerdo en que, de alguna manera, somos amigos en la distancia, porque compartimos una manera de ver la vida, y participamos de esa idea, yo con los audios y tú con las escuchas y tus mensajes... Otro abrazo grande para ti.
Muchas gracias a ti Luis por tus escuchas y palabras de apoyo. Abrazos.
Muchas gracias Carmenmu. Abrazos.
Hola Lucho Herrera, hace muchos años estuve en Mendoza, fui allí desde Chile, atravesando los Andes, un montón de horas, en autobus. Recuerdo que había un parque muy grande y bonito, y que la familia mendocina con la que pasé allí esos días fue maravillosa conmigo... Muchas gracias por tus escuchas y tus palabras. Abrazos.