Amor y voluntad

Alberto díaz lópez y griselda peña peña son de esas personas que le conocen los secretos a la tierra y que convierte en cualquier espacio ocioso en productivo o bello este matrimonio de cuarenta y seis años se vio obligado a abandonar la comunidad rural de la blanca con su finca y una historia familiar para trasladarse hasta la visión en el municipio manatí provincia las tunas con el objetivo de que su hija allí es el días peña quien nació como encefalopatía crónica estuviera más cerca de los servicios médicos de poli clínico con hospitalización martirio de manatí desde entonces comenzaron a ser esa magia para algunos que ellos llaman esfuerzo y como asegura griselda trajo consigo pedazo de la blanca para manatí te hoy se perciben el verdor y la variedad de las plantas ornamentales y frutales de su jardín y su padre o igual a la trece reflejaban la mata de guayaba cayó la culpa hola de pronto bueno para de flores pero el mate rosa una varilla blanca su esposo alberto fue otro que sorprendió a la conocida comunidad de los maestros al transformar desde hace unos seis meses y con ayuda de su señora un micro vertedero existente en la zona por un muerto que ya ha dado sus frutos a la familia y algunos vecinos como viene ya estaba desesperado café y té con roberto para sembrar y apretar un tiempo otra cara de pueda trabajar pero ya cerca o casi stone tren compara ponía japón cuatro que sangra ahora igual pregón también tenga un poquito negro madre que lo sembrar por color y yo también como otra gente incansables son esta mujer y este hombre los seres humanos extraordinarios que viven para su pequeña y excel y para el trabajo con casi setenta años ambos le dan lecciones de vida muchos al definir desde su experiencia que sólo el trabajo la voluntad y el amor son las claves para transformar no solo la tierra sino todo lo que cada quien se proponga muy fuertes si no se para alguna castro la juventud la gente tiene que trabajar ya que forzar no andar por ahí una moto ir a sembrar evitar