Llegan las vacaciones, el verano,... pero ha sido un año muy duro y, en muchas ocasiones, somos incapaces de encontrar momentos para el disfrute. Necesitamos aprender a disfrutar la vida. ¿Qué mecanismos nos lo impiden?
Es cierto que, y más con los tiempos que estamos viviendo, las personas tenemos muchas preocupaciones y problemas de todo tipo en el día a día (económicos, familiares, laborales, etc.), y en muchas ocasiones acaban superándonos. En ese caso, necesitaremos probablemente de ayuda psicológica para poder gestionarlos mejor; pero, a veces, no somos capaces ni de buscar algún momento de disfrute ¿por qué a veces somos incapaces de disfrutar de la vida? Incluso hay personas que llegan a afirmar: “pero si lo tengo todo…. y, sin embargo, … no puedo disfrutar de mi día a día”. ¿Por qué ocurre esto? ¿Por qué tendemos a vivir en una preocupación constante?
Comments