Has elegido rechazar las cookies basadas en consentimiento que utilizamos principalmente para gestionar la publicidad. En adelante, para acceder a nuestra web tienes que elegir alguna de las siguientes opciones.
Premium
3,99 €/mes o 39,90 €/año
Sin publicidad y mucho más
Plus
Por 9,99 €/mes
Contenido exclusivo y sin publicidad
Si has cambiado de idea, puedes aceptar las cookies y continuar usando iVoox de forma gratuita.
Con tu consentimiento, nosotros y nuestros 813 socios usamos cookies o tecnologías similares para almacenar, acceder y procesar datos personales, como tus visitas a esta página web, las direcciones IP y los identificadores de cookies. Algunos socios no te piden consentimiento para procesar tus datos y se amparan en su legítimo interés comercial. Puedes retirar tu consentimiento u oponerte al procesamiento de datos según el interés legítimo en cualquier momento haciendo clic en ''Obtener más información'' o en la política de privacidad de esta página web.
Nosotros y nuestros socios hacemos el siguiente tratamiento de datos:
Almacenamiento y acceso a información de geolocalización con propósitos de publicidad dirigida, Almacenamiento y acceso a información de geolocalización para realizar estudios de mercado, Almacenar la información en un dispositivo y/o acceder a ella , Datos de localización geográfica precisa e identificación mediante análisis de dispositivos , Publicidad y contenido personalizados, medición de publicidad y contenido, investigación de audiencia y desarrollo de servicios , Uso de cookies técnicas o de preferencias.
Comentarios
Felicidades por este repaso tan minucioso sobre el gato y el ratón más populares de los cartoons. Totalmente de acuerdo que la primera época de los cuarenta y cincuenta con Hanna y Barbera fue la más gloriosa de estos personajes míticos a pesar de que más adelante pasaran de manos y fuese la serie más irregular sufriendo repentinos cambios de su esencia original. Yo también veía los letreros enormes de Fred Quimby y gracias a vuestro podcast me entero de que era únicamente el gestor del estudio. No creo que cogiese un lápiz ni que intercalara. Sólamente llevaba los asuntos económicos que no es poco. Me uno a que bien merecen tanto Carl Stalling como Scott Bradley un podcast aparte porque tienen composiciones gloriosas. Es la esencia musical por excelencia de los dibujos animados. Dos grandes de verdad. Mi enhorabuena por el podcast. Muy completo.