

Description of 156 - Faenas de aliño
Carlo Padial y Nacho Vigalondo hablan del concepto de humor por asociación. Y eso me lleva a reflexionar sobre cómo nuestros niveles de exigencia se van haciendo más altos a medida que profundizamos en cualquier disciplina, y cómo tenemos aun así que saber equilibrar los momentos de explorar (buscando superar nuestros límites) y de explotar (aunque nos resulte aburrido y repetitivo).
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Uno tiene que asumir que no siempre puede estar brillante y que a veces toca simplemente saber hacer una faena de aliño. Soy Raúl Hernández González y esto es Diarios de un Nomad.
Estoy estos días escuchando la entrevista que le hace Carlo Padial a Nacho Vigalondo en su podcast Media Offline. Carlo Padial es un tipo listo y hay que reconocerlo bastante peculiar. A mí personalmente me gusta mucho su mezcla de agudeza, de ideas certeras, pero que la mezcla de surrealismo, que no sé cuánto es fingido y cuánto es que es que es así y la cabeza le va de una manera peculiar, y un puntito de costumbrismo.
Cuando uno le escucha contar sus batallas es capaz de crear escenas como muy concretas, muy graciosas, o a mí me lo resultan. En fin, si conectas con esos tres elementos quizás te apetezca escucharlo, aunque reconozco que quizás no sea para todo el mundo. Y Nacho Vigalondo, que es director de cine y que recientemente ha dirigido la serie Superstar, en la que habla de Tamara y de todos aquellos personajes de la televisión de finales de los 90 un tanto peculiares, los ha recreado con un imaginario un poquito distinto y original.
Yo la serie todavía no la he visto, pero he oído hablar mucho de ella y parece que ha dado con un tono y con una forma de contar la historia refrescante y distinta. Nacho Vigalondo también es un tipo listo y además es un tipo verborreico. Da la sensación de que el cerebro le funciona a muchas más revoluciones de lo que le funciona la lengua, y la lengua aún así le va bastante rápido.
Entonces a veces su discurso es como muy, no sé si decir atropellado, con muchas ideas y buscando como muchas líneas de pensamiento a la vez. Dicen que tiene hiperactivo TDAH y la verdad es que podrías asegurarlo escuchándolo. La cuestión es que la conversación entre ellos dos, pues como tipos peculiares, da para muchos matices curiosos.
Y uno de ellos, el que me invitaba a hacer esta reflexión, se enredaban en el concepto de humor por asociación. Era Nacho Vigalondo el que lo ponía encima de la mesa. ¿Qué quiere decir con humor por asociación? Venían hablando de la idea de que a veces se recurre a estructuras y formatos que todos asociamos con la comedia a base de haberlos escuchado mil veces, a base de haberlo visto mil veces. Digamos que cuando se utilizan esos formatos, esas estructuras, nosotros ya asumimos que eso que viene es un chiste. Aunque luego si lo analicemos individualmente no tenga mucha gracia, pero como tienen esa estructura y ese formato, el espectador lo computamos como chiste.
Es un poco como aquello de aceptamos pulpo como animal de compañía. Es como mira, gracioso o gracioso no es, pero como me lo has envuelto con este envoltorio, pues venga, vale, es chiste. No es un chiste excelente, ni siquiera notable, a veces apenas suficiente, pero bueno, venga, vale. Imagina por ejemplo que yo empiezo con una frase que dice van un francés, un inglés y un español y en el fondo da igual lo que luego yo diga detrás, que lo que diga sea más o menos gracioso.
Tú ya asumes que eso es un chiste y dirás, pues a lo mejor es un chiste que no tiene gracia, pero es un chiste. Y toda esta discusión venía a cuento de que, en opinión de ellos, llevamos como una temporada o mucho tiempo consumiendo comedias sin gracia. Películas, series, monólogos… que basan su éxito en ese tipo de recurso. Sé que son cómicos, pues por los actores que participan, por algunos clichés, por la puesta en escena, aunque en realidad si lo analizo no me hacen reír demasiado.
Es como si ves una película de Santiago Segura y dices, bueno, pues la nueva comedia de Santiago Segura. Oye, pero ¿cuántos momentos graciosos tiene? A lo mejor sí, si te gustan las películas de Santiago Segura, a tope con ello. Pero analizando chiste por chiste dices, hombre, pues esto no va a ganar un premio a la mejor comedia del año, pero es una comedia. No digo que no tengan razón, que la sensación… y me pasa a mí, que a veces pones la tele, no suelo poner mucho la tele, y están echando la típica comedieta española de los últimos 5 o 10 años.
Yo qué sé, pues sale Carmen Machi, sale Ernesto Sevilla, sale Santiago Segura y tú dices, vale, pues solo con eso yo ya sé que es una comedia. Luego puede ser más o menos.















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