1844. Cómo vivir

Muy buenos días. Entonces esto es ir dejando de ver la vida a través de los ojos del prisma de esta sociedad. Es difícil porque estamos en esta sociedad, por eso nos decía Bertrand Russell, en esta sociedad hay que cumplir lo mínimo. Más allá de cumplir con lo mínimo es contraproducente. Pero yo diría que este mínimo incluso hay que vivirlo desde el parámetro de la vida, no desde el parámetro de la sociedad. Y se puede hacer. Y no le preguntes nunca a nadie cómo, porque está en uno y es claro y es evidente, es lo que uno siente. Y para cada persona es diferente, es lo que sientes.

La gente a lo largo de los años me ha visto a mí un fallo. Y es que no digo el cómo, ya te lo he dicho muchas veces, pero he dicho el cómo en cada audio. El cómo no es algo concreto. La gente quiere que le digan cómo, pues mañana levántate a las seis, haz abdominales y luego cuando llegues al trabajo, haz no sé qué, haz algo específico, trabaja mucho para ser el mejor. Es que ese no es el cómo, porque para cada persona es diferente. Ya de hecho hay gente que levantarse tan temprano, los que son búhos, pues no les viene bien. Sería contraproducente que hiciesen eso.

El cómo no son cosas concretas. El cómo es una actitud. El verdadero desarrollo personal lo que promueve es una actitud. La verdadera espiritualidad lo que promueve no es una forma de vida, ascética, de hacer esto a esta hora y a esta hora. Es una actitud. Y yo le pongo un nombre del corazón y la ética, pero ni siquiera hace falta ponerle un nombre.

Es aquello que tú sientas, donde tú sientas que hay más sentido en tu vida, donde tú sientas que hay más alegría, más corazón, más amor, lo mejor que hay en ti. Ese es el camino, ese es el cómo. Y tirar de ese hilo. Técnicamente, digamos, como planteamiento teórico no puede ser más fácil. Vivirlo es difícil porque estás en un sitio donde, por ejemplo, imagínate que fuese, esto es como un ejemplo metafórico, que fuese guardar silencio y todo el mundo está gritando.

Y te están empujando para que grites. Todo el mundo o mucha gente a muchas horas. Incluso las personas que quieren estar en silencio están gritando. Pues aquí, hasta los que están deseosos, que somos, por ejemplo nosotros, personas con mucho deseo de transformación personal y tal, estamos atrapados en esos gritos, estamos atrapados en vivir un cómo que no es el nuestro.

Y que queremos verlo, verlo, verlo cada vez más, darnos cada vez más cuenta, a cada instante ver, oye, ahora dónde estoy, dónde está mi cómo, ahora desde dónde estoy viviendo, desde dónde estoy haciendo esto, lo estoy haciendo por miedo, lo estoy haciendo por mi ego, tengo ahora mismo vergüenza, tengo culpa.

Que no es que esté mal sentir todas esas cosas, pero vivir desde ahí de manera consistente no es lo que mejor nos hace sentir, lo que nos hace sentir es aquello que es pleno, que tiene corazón, que tiene libertad, que tiene fuerza. Y uno tiene que auto observarse y vivir desde ahí y hacer eso. Ese es el cómo.

El cómo no es que me digan qué tengo que hacer a cada momento del día o qué tengo, dónde tengo que ir o… eso es un absurdo. O cómo tengo que ser. Sé más hablador, sé más silencioso, práctica meditación, haz esto, lo otro haz… No, no, no, no es nada de eso, no es un contenido, es una manera de estar. Y tenemos una guía que es cómo nos sentimos.

Seguiremos hablando de esto con desesperación. Gracias por estar ahí. ¡Hasta mañana!