2037. Con los ojos fijos en ti, Señor (EDITADA)

Por la señal de la santa cruz de nuestros enemigos libran al Señor Dios nuestro en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Señor mío y Dios mío, creo firmemente que estás aquí, que me ves, que me oyes. Te adoro con profunda reverencia. Te pido perdón de mis pecados y gracia para hacer con fruto este rato de gracia. Madre mía inmaculada, San José mi Padre y Señor, ángel de mi guarda, interceded por mí.

En aquel tiempo entró Jesús en una aldea y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa, dice el Evangelio de hoy. Esta tenía una hermana llamada María que sentada junto a los pies del Señor escuchaba su palabra. Marta en cambio andaba muy afanada con los muchos servicios hasta que acercándose dijo, Señor no te importa que mi hermana me haya dejado sola para servir, dile que me eche una mano.

Respondiendo le dijo el Señor, Marta Marta andas inquieta y preocupada con muchas cosas, sólo una es necesaria, María pues ha escogido la parte mejor y no le será quitada. Este evangelio lo hemos meditado ya alguna vez durante estas meditaciones lógicamente porque es un evangelio precioso y la clave me parece a mí de lo que le pasaba Marta es que andaba muy afanada con los muchos servicios como nos dice San Lucas y por eso el Señor le dice andas inquieta y preocupada con muchas cosas, es decir la atención de Marta estaba ocupada con muchas cosas distintas aunque indudablemente una de esas cosas era Jesús pero esa dispersión de la atención ese ir como dispersa en tantas cosas esa fractura interior le hacía perder como el cuajo interior, perderse a sí misma en cambio la atención de María estaba fija en Jesús sólo en Jesús y esa concentración en una única cosa nos hace fuerzas interiormente fuertes nos da unidad nos lleva a poseernos a nosotros mismos pero encima cuando esa atención se focaliza en Dios, en Jesucristo además toda nuestra vida se ve beneficiada pues del amor de Dios que se derrama en nuestros corazones por eso se dice ha escogido la mejor parte y no le será quitada no le será quitada entre otras cosas porque ella misma no lo perderá porque toda su alma está en la unidad de un único recipiente donde se recoge todo lo que Dios tiene que decirnos pienso Señor que la solución para quienes estamos en medio del mundo no es dejar de cumplir las obligaciones profesionales y familiares y sociales y sentarnos a tus pies embobados todo el día a las 24 horas siete días a la semana pues no puede ser eso San Josemaría hablando en conversaciones con un periodista decía recuerdo una copla de mi tierra que dice la mujer que por la iglesia deja el puchero quemar tiene la mitad de ángel de diablo la otra mitad y añadía San Josemaría a mí me parece enteramente un diablo no es que la mujer tenga que estar con los pucheros necesariamente puede ser el hombre puede ser pero en fin pongo este ejemplo porque el ejemplo del evangelio eran dos mujeres Marta y María Marta que estaba dedicada pues a las tareas del hogar dispersa no porque las tareas del hogar dispersen sino porque ella estaba dispersa su atención mientras hacía unas cosas no estaba fija en Jesús y otra mujer cuya atención está exclusivamente fija en Jesús y me parece a mí Señor que la verdadera solución a este aparente dilema es ser capaz de trabajar en muchas cosas con la atención del alma fija en Ti con mis ojos fijos en Ti mi corazón fijo en Ti Señor por el amor todo por Ti por supuesto que tendré atención a las cosas que estoy haciendo pero no es la atención es una atención epidémica epidérmica superficial de la parte más de mi intelecto pero no es la atención de mi corazón de lo profundo de mi alma Santo Tomás decía que cuando una cosa es la causa por la que se hace otra