253. Qué enseñar a tu perro sordo para que confíe en ti y sea feliz

¡Bienvenidos a este nuevo podcast de Perros y Punto! Hoy vamos a hablar sobre un tema muy delicado y a veces polémico incluso, pero muy bonito cuando sabemos enfocarlo bien, y es sobre los perros sordos en nuestra sociedad. Quiero hablaros sobre este tema porque en realidad en nuestra sociedad hay muchos perros sordos, tanto que en algún estudio de Estados Unidos se ha determinado que más o menos el 10% de los perros que existen en el mundo tienen sordera.

Y hoy vamos a hablar sobre cómo comunicarnos con estos perros sordos, qué implica ser sordo para un perro, qué elementos tenemos disponibles dentro de las herramientas que nos permite la educación cañina para que en realidad la sordera no sea un problema, obviamente, ¿no? Y por lo tanto, aparte de los estímulos auditivos, qué más elementos tenemos disponibles para usar a favor de la educación.

Y también os voy a contar un poco los motivos por los que un perro puede ser sordo. Pero sobre todo me gustaría comenzar este podcast, porque ya sabéis que para mí los perros es una parte de mi vida tan relevante, como que es lo que me da la vida, la alegría y la ilusión por hacer lo que hacemos todos los días. Y aparte, saber que os ayudamos a diario a comprender mejor a vuestros perros, a daros claves que os revelan de repente como wow, como esos momentos de, hostia, esto no lo sabía y tiene todo el sentido, voy a aplicarlo con mi perro.

Eso cuando lo sentís vosotros, para nosotros en realidad es como el alimento y el motor de nuestro día a día. No solo del mío, somos un equipo de 10 personas y todos estamos en contacto todos los días, porque esto es una cosa muy familiar y a todos nos emociona mucho poder ayudaros. Pero en realidad nunca sabemos si estos efectos wow los tenéis aprendiendo con nosotros o no hasta que no nos lo escribís o nos lo mencionáis de alguna forma.

Así que desde aquí, para empezar este podcast, quería dedicarle este podcast y agradecérselo, agradecerle a todas las personas que nos escuchan siempre que se toman como ese minutito o segunditos de su vida para pincharnos un like o para compartir nuestro contenido con amigos que creen que les va a servir. Y sobre todo por seguirnos en este caso en el podcast, que es algo que a mí de todo el contenido que grabamos de redes sociales, el podcast ya sabéis que es el que más me flipa de todos, porque es donde puedo chapear sin límites. Perdón, broma.

Así que si nos seguís, si le dais a like y si valoráis este podcast con las estrellas que os permiten las plataformas en las que nos escucháis valorarnos, pues para nosotros eso es como el wow, el alimento que hace que todos los días sigamos haciendo esto con toda la ilusión del mundo. A partir de aquí, dedicándole este podcast a todos los que ya lo habéis hecho o lo vais a hacer, pues volvemos a los perros sordos. Y aquí quería mencionaros algunas notas importantes. ¿Qué es un perro sordo? Y muchas veces escuchamos por parte de las personas que nos escriben, que sabéis que nos escriben siempre cientos de personas con diferentes problemas con sus perros, y los perros sordos es uno de estos problemas.

Y las personas cuando nos escriben teniendo un perro sordo, habitualmente hacen algo como escribirnos desde la máxima pena ya de entrada. Oye, es que, ¿sabes? Mi perro es muy especial, es que le pasa una cosa y, claro, porque pobrecillo y así, ¿no? Entonces, obviamente es algo que nos da pena porque nos dan pena las cosas que nos parecen como injustas o por qué está pasando esto. Pero es verdad que la pena, y aquí es este punto polémico y no sé si me voy a explicar correctamente para que se entienda lo que quiero expresar. Siempre os digo que no sintáis pena por vuestros perros, pase lo que les pase. Y hay veces que se queda la gente en esa frase, ¿no? Sin escuchar lo demás.

Entonces dicen, ¡oh, qué fuerte, qué insensible! Claro, la realidad de esto es que cuando os digo que no sintáis pena por vuestros perros no es para que no tengáis compasión por ellos, que es otra cosa distinta. Cuando siempre os animo y mucho a que tengáis compasión, ojo, no sólo con vuestros perros, sino también por otros humanos y otros animales en general.

Porque por eso somos seres humanos, que tenemos capacidades cognitivas, sobre todo abstractas, en nuestra capacidad de pensamiento que nos distinguen de los animales. Cada animal tiene sus propias cualidades que le distingue de otros, pues a los seres humanos nos distingue esto. Así que la compasión es parte de lo que a un ser humano le hace ser precisamente humano.

Entonces, cuando os digo que no sintáis pena por vuestro perro, simplemente lo digo porque ese sentimiento de pena que tú sientes por tu perro, en realidad el perro, o sea, tu perro no lo sabe gestionar, no lo comprende. Porque el perro no siente como tal pena. La pena es también una sensación como muy abstracta, digamos.