266.- Los chicos

Mi domingo. Pues...

¿Tú pedías domingo? Sí.

¿A tus papás? ¿A tu abuelo? ¿A quién sé? Principalmente a mis padres, pero a veces también a mis abuelos.

O sea, pero ¿cómo es esa mecánica? O sea, yo no pedía domingo.

¿Cómo era esa mecánica? No me acuerdo cómo surgió. No sé de dónde salió la idea.

Solamente me acuerdo que sí ya era un...

Probablemente fue por parte de mi abuela, que dijo Ten tu domingo.

Sin pedirlo, y ya fue como un...

¿Me das mi domingo? Y se extinguieron mis padres.

O sea, pero tú...

Creo que fue algo así.

O sea, ¿algo te dio la confianza interna...

...de llegar con alguien y decir, dame...

O sea, yo siempre he sido muy sensible en esa parte.

O sea, a mí también me decían que no, pues ¿qué te da? Pero yo siempre he sido muy sensible en esa parte.

No pedía nada.

Más que a mi mamá y no le pedía dinero, sino que le pedía juguetes.

Entonces era como que...

No, no, no, no, no, sí.

No, no, no, no, no.

¿Qué traigo? Bueno, ya, pues...

De niño, fíjate que no tenía ese problema.

De más grande, sí.

Ya era como, híjole, no quiero tardar peliche.

Pero de niño, pues sí, era como...

Como que ya se había normalizado eso.

Era de domingo, era por ejemplo...

Siempre los domingos era visitar a abuela materna o abuela paterna.

O abuelos paternos.

Y que siempre, como estábamos los primos ahí juntos, ya sabíamos que el domingo era día de...

No de domingo, sino de hacer desmadre, jugar o algo así.

¿Y qué es lo mejor que puede acompañar ese tipo de diversión? El dinero.

El dinero, sí, güey.

Para poder comprar papas, refrescos, alguna película, el iPad.

Y entonces sí, era como...

O sea, no era la primera idea que teníamos, pero ya en el desmadre era como que, ah, pues...

Vamos a pedir el domingo o que nos den dinero.

Para ir a comprar fricherías o darnos una vuelta por ahí en el parquecito.

O sea, no lo ahorraban.

No.

Se lo moraban.

Era para el momento, sí.

La vida es exceso, así es como debe de ser.

Y te los mamabas, te los mamabas.

Pensé que los Cheetos costaban $2.50, y la Coca como $5 pesos, tú ya te sobraba algo de dinero.

Te lo mamabas.

Te lo mamabas.

Hay chicles, chocolate.

Sí.

Probablemente sí sobraba dinero, pero no recuerdo si llegaba intacto casi o le alcancía.

Probablemente se quedaba en el pantalón y la lavadora se lo escondía.

Gracias.

Probablemente.

Pero sí, eso era más o menos los domingos.

O íbamos a las maquinitas o a una de videojuegos.

Ah, sí, sí.

Ahí sí.

Valias Verga en el Metal de Dios.

Sí.

Cuando íbamos y rentábamos allá por el...

Donde vivía mi abuela, mis abuelos paternos.

Bueno, donde vive mi abuelo paterno.

Antes de llegar a la plaza...

¿Dónde está la papelería? Plaza Fiesta.

Plaza Fiesta.

Había un callejón donde había una casa donde rentaban computadoras y consolas.

Y ahí tenían el Nintendo y el GameCube.

Y jugábamos ahí The Raw.

Eran excelentes esas épocas.

Sí.

Muy bien.

Bueno, y regresando a tu domingo.

A mi domingo.

Adulto.

Bueno, he pedido domingo mis zapatos.

Para poder salir.

Para poder salir.

Para salir.

Y permiso para salir con mis amigos.

Esta canción vino corta.

Vino muy corta y luego también el fondo mejor.

Me levanté bien.

Ah, bueno.

Me desvelé el sábado también.

Ahí sí, tomé el sábado, entonces...

Pisteaste.

Sí, pisteaste.

¿Dónde fuiste a pistear? ¿Dónde fuiste a pistear? Con...

Tiene que ver con el domingo.

Fui a la casa de...

Al depa de Iván.

Porque hicimos un...

Mientras tomábamos estábamos haciendo una línea del tiempo de todo lo que pasó en la primera temporada del juego.

El juego The Raw.

Porque Iván ya quiere tener un...

Se quiere poner como...

Uno.

Ya quiere plasmar sus ideas.

En lo que sea.

Ya para desfogarse.

Porque siempre ha tenido ese problema de...

Siempre tiene muchas ideas pero nunca las plasma.

Y ya empezó a escribir algunas, u otras no las escribe pero ya las plantea en un juego.

Y también quería hacerlo para llevar un control de lo que ha hecho.

Entonces hicimos una línea del tiempo de todo lo que pasó en la primera temporada.

Como un conteo.

Y bien, mientras hacíamos eso pues tuvimos que...