328: Lo que todos callan: La crisis de los hombres jóvenes - soledad, fracaso y pérdida de masculinidad

Muy buenas compañeros. Llevo una década con la cabeza metida en todo lo que tiene que ver con las relaciones entre hombres y mujeres y los últimos cinco años ayudando a cientos de hombres a tener más y mejores relaciones con las mujeres.

He visto muchas cosas y una evolución muy rápida de la sociedad y de la cultura hacia una eliminación sistemática de una masculinidad que ahora se etiqueta de tóxica.

Sin embargo, actualmente parece que hemos tocado techo en lo que respecta a las consecuencias de esta eliminación y ahora estamos empezando a ver los resultados del experimento.

La generación de hombres entre 18 y 30 años está al borde del colapso.

La estadística es para echarse a llorar y lo peor de todo es que todo el mundo mira para otro lado y barre debajo de la alfombra. Pero por más que no queramos ver el elefante en la habitación, la realidad es que esta crisis silenciosa va a estallar en los próximos años. En el episodio de hoy vamos a ponerle nombre y apellido a esta crisis.

Una crisis en la que hombres han perdido el rumbo y se sienten desplazados de la sociedad.

Hay suicidios, adicciones y soledad en cifra récord que pondría la piel de gallina a cualquiera.

Y un mercado romántico donde ellas dicen que no hay hombres a su nivel y ellos responden con resentimiento, drogas, porno o videojuegos.

Pero no me voy a quedar solamente en cifras depresivas porque esto no es Telecinco ni las noticias.

En este episodio vas a salir con una radiografía clara de qué está fallando y con un plan práctico para no convertirte en otro hombre de la generación perdida.

Esto es lo que vas a escuchar.

Vamos a ver por qué el empoderamiento femenino no vino acompañado de un empoderamiento masculino y qué precio estamos pagando por ello.

Vamos a ver cómo la trampa de redefinir la masculinidad está castrando a los hombres y frustrando a las mujeres.

Y vamos a hablar también del protocolo mínimo para recuperar tu rol y que es obligatorio para cualquier hombre en 2025.

Sin victimismo, sin guerra de sexo, sin trucos mágicos.

Simplemente biología, estrategia y acción.

Así que empezamos.

Muy buenas, compañero.

Bienvenido a Radio Hombre Alfa Punto Top, tu canal de podcast sobre seducción, dinámicas sociales y Red Pill más completo de habla hispana.

Bien, antes de pasar con el episodio que viene cargado de cosas, ya te aviso, te recuerdo que voy a liar algo muy gordo por la comunidad de e-mail.

Estoy avisándolo, llevo mucho tiempo avisándolo.

Creo que nunca he avisado tanto, tanto tiempo, así que será por algo.

Si te interesa y ya te digo yo que te va a interesar, debajo de este podcast tiene un enlace para apuntarte gratis a esa comunidad y no perderte cuando suelte la bomba que estoy deseando de soltar.

Dicho esto, vamos con el episodio.

Primero vamos a empezar por entender lo principal.

¿Qué está pasando con los hombres hoy día? Porque esto de la crisis de la masculinidad, de la crisis de los hombres jóvenes, de la generación perdida, de los lost boys, etc.

Está empezando a sonar y va a seguir sonando y cada vez más alto.

Así que probablemente si aún no sabes muy bien de esto porque no te ha llegado todavía la información, te va a acabar llegando y va a ser algo de lo que se va a hablar mucho.

Bien, ¿qué está pasando hoy día con los hombres? Estamos ante una crisis silenciosa.

Una generación de hombres que no encuentra su lugar en el mundo porque poco a poco cada vez hay menos lugar para el hombre en el mundo moderno.

Hombres jóvenes que no prosperan ni emocional ni económicamente y lo peor de todo es que nadie habla de ello.

Si miramos los datos, según datos del centro de investigaciones Pew Research, el 63% de los hombres jóvenes en Estados Unidos están solteros frente al 34% de las mujeres.

Y el 28% de los hombres menores de 30 años no ha tenido sexo en el último año, la cifra más alta desde que existe en registro.

Estamos ante una generación de hombres jóvenes inviable, tanto emocional como económicamente.

Evolutivamente hablando, los hombres siempre hemos sido el sexo prescindible, especialmente por las diferencias en cuanto al coste reproductivo entre hombres y mujeres.

Nuestra utilidad siempre ha estado relegada a nuestro papel proveedor, protector y de líder.

Sin embargo, en una sociedad en la que las mujeres no necesitan un hombre, donde ser proveedor y protector se asocia con ser un unga unga y donde ser un líder es sinónimo de opresor machista, literalmente no nos queda nada que aportar a la mesa.

¿El resultado? Según datos de diversos artículos, los hombres hoy día tienen 4 veces más probabilidades de suicidarse que las mujeres, tienen 3 veces más probabilidades de desarrollar adicciones que las mujeres y tienen el doble de probabilidades de acabar en prisión que las mujeres.