329. Tina Sachtwell: Un secreto bajo la escalera

19 de marzo de 2017, Carriageway Hill, Irlanda. Tina y Richard habían conducido 35 kilómetros para ir al famoso mercadillo de coches de esta localidad irlandesa. Era algo que la pareja hacía a menudo. A Tina le encantaban los mercadillos, especialmente los de coches, aunque este al que habían ido tenía además otros puestos donde vendían ropa. Se compró una chaqueta negra y un vestido, que al regresar a casa dejó colgados en la puerta del salón.

Estaba deseando ponérselos. Al día siguiente, el 20 de marzo, Tina y Richard se levantaron temprano y desayunaron juntos a eso de las 10. Tina, tras terminar, le pidió a su marido que se acercara al Aldi para comprar algunas cosas que necesitaba. Aldi estaba a una media hora en coche, en una localidad llamada Dungardhan. Él aceptó, cogió las llaves del coche y se fue. Richard regresó sobre las 2 de la tarde. Cuando entró en casa todo estaba en silencio. Llamó a su mujer, pero ella no respondió. Le pareció extraño.

No le había dicho que tuviera algún plan o que necesitara acercarse a algún sitio en específico. Se sorprendió al ver que sus llaves estaban tiradas en el suelo y su teléfono móvil en la mesa del salón. Dos cosas que hubiera cogido seguro de haber ido a alguna parte. Heidi y Ruby, los dos perros del matrimonio, también estaban en casa.

Tina los había dejado solos y ella no solía hacer tal cosa. Siempre que podía llevárselos, lo hacía. Cuando Richard empezó a ponerse nervioso por la ausencia de su esposa, comenzó a registrar la casa para ver si faltaba algún objeto de valor. Empezó a pensar en el robo, incluso en el secuestro. Abrió cajones y armarios. Y se percató de que faltaban dos maletas y 26.000 euros que tenían en una caja fuerte.

Esa cantidad la habían guardado en metálico tras vender su anterior casa en Fermoy. Richard estaba desconcertado. No entendía nada de lo que estaba pasando. Y cuando intervino la policía, tampoco sabía por dónde empezar a investigar este caso. La clave de todo estaba en un lugar que pasó desapercibido para todos durante años. Debajo de la escalera de la vivienda de Tina y Richard.

Hoy nos trasladamos hasta Irlanda para conocer el caso de la desaparición de Tina y cómo se llevó a cabo una investigación que duró varios años antes de poder resolver todo el misterio. Pero antes de arrancar con el caso y hablar de sucesos como el que vamos a conocer hoy, hagamos una pausa para abrir un expediente paralelo. El caso Repsol en el festival de Sitges.

Las pistas preliminares revelan que Repsol ha preparado hasta 6.300 litros de combustible renovable para alimentar los generadores eléctricos, emitiendo 17,5 toneladas de CO2 menos. Y no queda ahí. Los indicios señalan a Repsol como responsable de suministrar energía solar a las experiencias más buscadas. Los puntos de recarga de móviles, el fotocall del mirador y hasta la King Kong Área. Pero hay otra clave de todo este misterio.

En la estación de servicio de San Pérez de Ribes, Repsol ha sido cazado, habilitando un punto de carga rápida para la flota eléctrica del festival. Con todas estas pistas sobre la mesa, el veredicto es sobrecogedor. Cuando unimos energías, lo pasamos de miedo. Repsol, partner energético del festival de Sitges del 9 al 19 de octubre. Y ahora sí, ponéos cómodos porque arranca un nuevo True Crime aquí, en Crónicas de la Calle Morgué.