379. Sexo y lo que surja: Desniveles sexuales

Sexo. Se perfuma.

Porque quieres sexo. Te pidió el teléfono.

Porque quieres sexo. Se atrevió a hablarle.

Porque quieres sexo. Se pone nervioso.

Porque quieres sexo. Se conocieron.

Porque querían sexo. Te regaló chocolate.

¿Qué pasa? Buenos días, buenas tardes, buenas noches, amigos.

Cuando estáis escuchando Patatín Patatero...

Champ, champ, champ, champ, champ.

Champ, champ, champ, champ. Champ, champ, champ, champ.

La fantástica Zalí.

Un tobogán.

¡Venga, tanto bogal! ¡Hola, calaza pequeña! Juanma Vázquez.

¡Hola, muchacha! ¿Cómo estás? Aparte de estresada.

Tengo que decir que este programa puede ser fanástico una puta mierda, menos mal que tenemos refuerzos, ya lo diremos, porque en el reto que estaba la canción, de la intro, yo ya estaba aquí sentada pensando cosas raras.

¿Sabes cuando no estás dormido pero tu mente está en otro sitio? ¿Tipo de cosas? No sé, en plan...

Pues es que hoy vamos a casa a los trozcos, tengo un regalo, le he puesto una moña, no sé si se da demasiado, y si cojo no sé qué, tal, no sé qué, pero...

¿Sabes? Cosas que tu mente divaga.

¿Qué cosas tiene la vida, eh? Porque cuando te estás quedando sopa, o sea, a mí me da por pensar unas cosas que digo, pero un momento, o sea, yo estoy viendo una peli y se me cierran los ojos momentáneamente y de repente pienso hay una lima que yo que sé, que es mejor que otra y digo, pues porque estoy pensando en una lima para las uñas. En un segundo, o sea, un segundo pienso eso, me despierto y digo, ah, la lima.

Y ya vuelvo a mí mismo y digo...

¿Ese momento en el que te das cuenta de que tu mente está en un sitio que tú desconocías? Sí, sí, totalmente, totalmente.

Sí, sí, está...

A mí en realidad son los que más me gustan llevarme dormido.

Bueno, pues si te quedas y te oímos roncar, ya te espabilamos.

Vale, llamad al timbre o algo.

Efectivamente. Oye, ayer vaya día te echaste de manitas, eh, que te he visto. ¿La mejor vivicomaníaca del mundo soy o no soy? ¡Madre! ¿Y por qué hiciste una gatera? Eso me inquieta bastante.

No, la gatera estaba puesta.

Entonces, para que no se vea el agujero que en el agujero de la gatera hemos metido, ¿sabes dónde se pinchan las flores del cementerio, que es una espuma verde? Sí, sí, sí.

Pues eso, lo he metido...

Joder, qué bien has descrito eso, porque esa mierda de espuma verde, sí, perfecto, la de las flores del cementerio. Claro, pues esa espuma la hemos metido en el agujero de la gatera, entonces, para que no se viera, he vuelto a colocar la gatera, y por el otro lado, pues ya he vinilado la puerta con un papel que lleva como un aislante. O sea, ¿siempre ha habido una gatera en esa vivienda? Sí, pero cerrada, porque estaba el agujero, pero por el otro lado, en realidad había unos paneles de madera.

¡Qué movida! Oye, y lo de la puerta esa que has hecho, ¿cómo se hace también? Eso está bonito, ¿eh? Pues es que la puerta de la cocina la cortamos y le quitamos los paneles de madera y estaba hecho una mierda, y nada, pues he comprado como unos vinilos que además son gorditos, como almohadillados, y dan un poco de aislante, porque como va a ir en la parte del apartamento para que no entre el frío, y pegándolo, y ya está. A ver, ¿no? Fácil, ¿eh? No, no, no. A mí me ha parecido muy bonito. Yo es que no tengo ni puta idea de nada de esto, así que aquí la sección de bricomanía, recordad que la izquierda libera y la derecha aprieta.

¡Eso! Efecto los tornillos de seguridad de las ruedas del coche, que van al revés. ¡Anda, no me digas! Sí, por si acaso pasa.

¡Hijos de puta, eh! Eso van siempre a contrapelo.

Esos son unos anarcas. ¡Bueno! Bueno, pues, ya está.

Este programa sucederá en el tiempo y en el espacio, no sabemos cuándo.

Muy bien, ¿no? Lo mismo, ya no estamos ni vivos, porque estamos ahí de viaje y no sé qué.

Ojalá, habré pasado.