445 - El misterioso mecanismo de Anticitera

Estas escuelas de mis usuarios corría la primavera del año mil novecientos cuando el capitán dimitri con todos al mando de su pequeño barco dedicado a la recolección de esponjas se vio sorprendido por un brusco cambio de tiempo habían zarpado hacia algunos días de su puerto base en la isla si mi una isla griega situada junto a la costa sur de turquía y habían navegado ese tiempo prácticamente con rumbo oeste con todos cálculo mentalmente que debían estar al sur de la península del pelo pone eso y al norte de la isla de creta pero desde luego estaban en mar abierto mientras algunas ráfagas de viento empezaban a silbar en la garcía de su barco o tío el horizonte y por suerte no demasiado lejos se apreciaba la silueta escarpada de una pequeña isla no lo dudó un instante y puso rumbo a ella para buscar refugio al shock aire de su costa poco más de una hora después se encontraban ya fondear dos al resguardo de un promontorios rocoso y como había previsto a ese lado de la isla el mar estaba completamente en calma allí pasaron la noche y al día siguiente la situación no había cambiado y con todos decidió aprovechar el tiempo probando suerte mientras el temporal a imaginaba estaban anclados sobre un fondo de cuarenta y cinco metros de profundidad y ese solía ser el límite más profundo en el que vivían las esponjas que recolectaban pero la transparencia de aquellas aguas le hacía pensar que quizás podrían tener suerte seguramente el temporal aún duraría un par de días más y no perderían nada por intentarlo ordenó a uno de sus mejores buzos que bajarse a echar un vistazo para comprobar si el fondo marino de aquel lugar era rico en las esponjas que buscaban una vez vestido con su pesado traje de lona causada a al buzo la aún más pesada escafandra metálica y abrieron el conducto del aire que un compresor manual le abastecía a través de una tubería flexible también hecha de lona causa putada el propio buzo regulo la válvula que les suministraba el aire y tras dar la señal de que todo estaba bien fue izado y depositado en la superficie del mar donde se sumergió lentamente a medida que sus compañeros le iban haciendo descender largando poco a poco el chavo que le unía con el barco el hombre encargado de gritar las marcas del cabo se detuvo cuando llegó a los cuarenta y siete metros el buzo había llegado al fondo mientras no dejaban de bombear aire se dispusieron a esperar a que el hombre sumergido les diera la señal para ser izado no habían transcurrido ni cinco minutos cuando el chavo se tenso y sea flojo dos veces seguidas era la señal y desde la cubierta del barco comenzaron a recoger el chavo haciendo subir lentamente al buzo a la superficie pocos minutos después el buzo se encontraba de nuevo en la cubierta del barco pero algo le pasaba aunque los cristales empañados de las pequeñas ventanas redondas de la escafandra no dejaban ver bien la expresión de su cara era evidente que el buzo gritaba algo en su interior algo que no conseguían entender por fin le quitaron el pesado casco metálico y todos pudieron oírlo con claridad