794. La suerte no existe (San Matías) (EDITADA)

Por la señal de la santa cruz de nuestros enemigos líbranos señor dios nuestro nombre del padre del hijo y del espíritu del señor mío dios mío creo firmemente que estás aquí que me vez que me oyes te adoro con profunda de referencia te pido perdón de mis pecados y gracia para hacer con frutas este rato de oración madre ni inmaculada san josé mi padre y señor ángel de la guarda intercede por mí y hoy celebramos la fiesta de san matías y nos espera nos encomendamos señor ya desde el principio le pedimos en san matías ya desde el principio que que interceda por nosotros que también queremos será postres como el delante delante tuyo matías fue ese apóstol que sustituyó a judas lo sabemos bien después de que el señor subiera los cielos pedro dice a los apóstoles que es necesario elegirá a alguien más para completar el número de los doce con una gran delicadeza el señor y también como buen judío saliendo el simbolismo que tenían los doce apóstoles las doce tribus de israel el nuevo pueblo de dios que iba a ser la iglesia y sin duda inspirado por el espíritu santo deciden elegir alguien mas entonces la primera lectura de la misa nos dice que para elegir el sustituto de judas tenían dos candidatos y lo que hicieron fue rezar al espíritu santo con esta oración señor tú que penetra es el corazón de todos ahora en el segundo día de escenario nosotros solo podemos rezar también al espíritu santo señor tú que detrás el corazón de todos muéstranos a cual de los dos has elegido para que ocupe el puesto de este ministerio y apostolado hasta aquí pues es todo lógico porque qué cosas más natural que acudir al espíritu santo al espíritu de jesucristo que había extendido los cielos pues para pedirles que se iluminará a ver quién quiere energía pero lo asombroso para mi es que después de rezar lo que hacen es echar las suertes sea aquellos primeros en manos nuestros tenían una una fe tan potente la providencia divina que no pensaban que la suerte dependiera del azar o de supersticiones sino que pensaban que la suerte dependía absolutamente de dios es decir que la suerte no existía que lo que existía era la providencia de dios el cuidado de dios diseñar la verdad es que a mi se me aparece y quizás también los necesitados muchas veces se me aparece como una lección tan fundamental en la vida pensar que la suerte no existe que lo que lo que existe es tu amado voluntad los planes tuyos los planes de dios que se cumplen siempre contando con mi libertad con la libertad de los hombres y por eso pues en aquella hora acción que tú nos enseña este muy al principio se dice hágase tu voluntad en la tierra es decir y nos trazamos esto para recordar a dios cuál es para recordar que es lo que tiene que hacer para cumplir su sino como una manera de alinear nuestra pequeña voluntad nuestra libertad con la gran voluntad con mayúscula con una gran libertad de dios para dirigir nuestra voluntad hacia donde dios quiere si tu voluntad en la tierra cielo jefe de la de estos primeras hermanos nuestros otros siempre intentamos evitar como primeros cristianos los primeros cristianos nuestro padre san josemaría tantas veces nos dijo que nosotros teníamos a vivir lo que vivían los primeros cristianos no vamos a intentar vivir no lo que los primeros cristianos como toda la iglesia constantemente que una y otra vez va convirtiendo si volviendo al origen volviendo al origen con una mayor riqueza y doctrina quizás o con una mayor riqueza de más que de doctrina de licitación de la doctrina etcétera pero pero siempre problemas al espíritu y miramos los ojos pues a ese libro solo donde se nos cuenta cómo era el principio los hechos de los apóstoles nuestros hermanos estaban convencidos de haber sido elegidos por dios no solamente por la