895- Libros contra Inteligencia artificial ¿Hacia la muerte del libro?

Tecnología contra libros. Inteligencia artificial contra libros. Contenido contra lectura. Los libros son una de las formas de conocimiento, una de las formas tecnológicas para transmitirlo, más antiguas que existen. Es una de las mayores innovaciones del ser humano y su perseverancia o su existencia está empezando a ser puesta en duda por parte de aquellos que consideran que la inteligencia artificial va a arrasar con la lectura, va a arrasar con los libros.

Yo creo que hay algo que no se entiende de la inteligencia artificial y sobre todo que no se entiende de los libros. Puede, por supuesto, conseguirse que la inteligencia artificial, igual que las pantallas, igual que el consumo de contenido de los móviles, haga que el peso cultural de la lectura, el peso cultural de los libros, sea menor. Aunque esto sería debatible.

Pero el pensar que un resumen hecho por inteligencia artificial sustituye a un libro, es como pensar que un resumen encontrado en una web de un libro sustituye a leer ese libro. Lo que hace la inteligencia artificial cuando se le pide a alguien que resuma un libro, en el fondo no es distinto que encontrarte un resumen que ha hecho tu compañero de pupitre y copiarlo y entregárselo a la maestra.

Eso no significa que hayas leído el libro, porque la lectura de un libro no es el aprendizaje de lo que dicen cuatro o cinco ideas. La lectura de un libro es la interiorización de principios, de claves, que quedan grabadas a fuego cuando alguien utiliza diez, veinte, treinta, cincuenta, cien horas de su vida leyendo algo. De hecho, los grandes hombres a lo largo de la historia, la mayor parte de ellos, por supuesto hay excepciones en cualquier campo, pero la mayor parte de los grandes hombres de la historia son grandísimos lectores en cualquier campo. Cualquier campo intelectual, por supuesto.

Estamos hablando desde Elon Musk a Steve Jobs, desde Edison a Ford, prácticamente cualquier CEO de cualquier gran empresa o mediana empresa del mundo lee entre 50 y 100 libros al año. Eso no significa que los CEOs los lean del principio hasta el final. De hecho, la lectura de un CEO de libros suele ser la siguiente.

Utilizan o leen libros de no ficción, la mayor parte de ellos, y llegan al punto en que consideran que ya no aporta valor. Por ejemplo, en los libros de no ficción de los últimos años lo normal es que puedan tener 300, 400 páginas, aportan valor en las primeras 70, 80, algunos incluso 100. Es raro los libros que aporten valor durante el conjunto de la obra. Lo que hacen es que tienen que rellenar y empiezan a repetirse.

Lo que hace un CEO cuando lee un libro así es en la página 80, 90 y además cuando alguien lee mucho, y yo estoy ahora en una espiral de mucha lectura, cuando te has acostumbrado a leer ciertas cosas, te das cuenta cuando está empezando el autor a marear la perdiz y a estirar para llegar a lo que es el límite que se considera que vale pagar los 20 o 30 euros que cuesta normalmente un libro nuevo. Hay excepciones, libros técnicos pueden costar 100, 150, 200, pero lo normal son eso, entre 20 y 30 euros.

Con lo cual consideran que tienen que rellenar esas 300, 400 páginas, pero sólo lo que ellos aportan, lo que consideran que pueden aportar, se cuentan unas 100 páginas. Es un libro que sería mucho más fino. Ese libro los CEOs a los 100 páginas, como digo, cuando han leído un 25% o 30%, si ya detectan que no van a recibir más, lo tiran y empiezan otro. Eso no significa que esas 400 páginas se puedan resumir en una página. Ni significa ni siquiera que las 100 páginas se puedan resumir en una página.

Ni siquiera significa que