ADOPTAR VILLA M,ARIA 29-03-2025

Bueno, conocimos una historia que nos impactó mucho hace unos días atrás y dijimos vamos a entrevistarla, vamos a buscarla, la localizamos, nos referimos a una mamá que adoptó cinco hijos, cinco hijos, una historia hermosa. La verdad es que cuando dimos con ella nos encontramos con que la historia no era tan hermosa, hermosa el gesto de ella efectivamente y la evolución que tuvo ese gesto, el amor.

Bueno, cinco hijos, una mujer sola, soltera y de pronto nos enteramos que se había incluso tenido que mudar porque los chicos no habían sido aceptados, los discriminaban mucho por ser adoptados, incluso hasta bueno se tuvo que mudar de ciudad, así que no quería tampoco salir al aire con esta historia. Entonces ahí fuimos a la historia de Pau que está con nosotros ahora, que nos comentaron que ha fundado la Fundación Adoptar de Villa María y que creo que también ha adoptado cinco hijos, si no recuerdo mal o algo así, ya le voy a preguntar porque no tengo acá la data Pau. ¿Cómo andas Pau, me escuchás? Hola, qué tal, buenos días. Buenos días, completame un poquito la información.

Sí, sí, soy mamá de cinco adolescentes ya, adolescentes y pre-adolescentes, desde hace siete años y medio aproximadamente. ¿Vos adoptaste porque eran hermanitos a los cinco? Respondí a una convocatoria pública y en ese momento estaba con mi pareja y bueno, fue un proyecto de a dos y ahora bueno, somos papás separados, pero bueno, yo estoy conviviendo con los chicos. Ah, y remar la sola con cinco adolescentes, ¿cómo es la cosa? Vos sabés que justamente nuestro tema de hoy es adolescencia, ¿no? ¿Cómo te vas yendo con ese tema? Fácil, pero no es imposible y creo que por ahí lo más importante es la palabra, hablar, conectar, estar, ocuparse.

No es fácil porque bueno, yo trabajo, por suerte tengo a mi mamá que me da una mano a la mañana con los chicos cuando yo estoy trabajando y bueno, todo el otro tiempo trato de estar acá presente, que me parece lo más importante. ¿Qué edades tenían los chicos cuando los adoptaste? Tenían cuatro y diez años, ahora tienen entre 12 y 17 años. Ah, claro, entre cuatro y diez años y ¿respondieron bien los chicos? O sea, ¿te adoptaron, vos los adoptaste a ellos, pero ellos te adoptaron como mamá? Sí, yo creo que es, siempre digo, ni siquiera es un día a día, con ellos es un minuto a minuto, o sea, aprendes un montón.

Los tres más chicos, cuando apenas los conocimos, que tenían cuatro, seis, siete, así corriendo mamá, papá, cuando nos vamos a Córdoba, ellos son de jujuy. Las dos más grandes, también más tranquilas, pero bueno, después fue la más grande, acompañarla en el rol de niña, que ella estaba ocupando el rol como de mamá de los cuatro más chicos, entonces de decirme, no los retes, no les pongas límites. ¿Competía con vos en cuanto al maternaje y la crianza de los chicos? Pobrecita, ¿estaba acostumbrada a ser la mamá? Creo que hoy es con la que más hablo. Ay, qué bueno, porque pudo haber salido por la culata el tiro este, ¿no? O sea, la competencia.

Creo que es muy importante el haber participado antes de charlas con la fundación, de escuchar las experiencias de otros papás, entonces yo sabía que iba a tener crisis, que en algún momento alguno me iba a decir que se quería ir, alguno me iba a decir que yo no era su mamá, así en las discusiones, ¿no? Sí, sí. Y bueno, ya estaba como un poco más preparada para eso, si bien cada casa es un mundo y cada relación se va creciendo. ¿Te dijeron alguna vez, vos no sos mi mamá, que venís a darme órdenes a mí, te dijeron eso? Alguna vez, así, en alguna discusión, pero uno siempre calmo y no siempre calmo.