Alma Sans y el campo energético de las casas.

Bien pues ya estamos aquí liados un día más con este tiempo de radio para hablarte de pensamiento, de sensaciones, de emociones, de cariño, de calor y de entrega, aquella entrega que nos enseñó el de arriba enviando a su hijo que fue crucificado por los pecados del mundo, del ser humano, el único animal que hace daño por antonomasia, por gusto y así nos va, los pecados capitales, si no existieran el mundo sería totalmente diferente.

Un día más saludándole a Alma Sanz, muy buenas noches.

Buenas noches bien hallados, bendiciones para todos Pedro.

Buenas noches, bienvenida querida Alma, bueno pues una semana cargada desde luego de energía, energía positiva, porque triunfó la luz ante la oscuridad, como el trabajo que viene realizando Alma Sanz, trabajando contra los demonios, ese es tu trabajo verdad querida Alma, liberando los demonios Pedro, liberar los demonios de las personas, que a ver los hay, los hay muchos, por desgracia sí que los hay y se manifiestan de diferentes maneras, el demonio como bien sabemos, bueno pues, él ha intentado siempre, camuflarse en personas, que no existe, que pensamos que no existe, pero existe, sí sí existe, tú lo has visto además, wow, muchas veces, y muchas veces, porque el demonio se presenta con cara y ojos y demás, totalmente, sí, claro, sí sí, o sea aparte de ser una energía, aparte es, aparte de una energía es físico, se presenta de forma material, sí, de forma material se presenta, y hay personas como tú que lo veis, y no os da miedo, no, estás acostumbrada, sí desde pequeñita lo he visto, y nunca te ha dado miedo, has pensado y ese señor raro no, bueno da respeto, más que miedo me da respeto, porque digo, bueno si me tengo que enfrentar a él, tengo que saber cómo hacerlo, y tú de pequeñita cuando lo veías, por ejemplo, pensabas, rezaba, así, siempre, y desaparecía, me veía como una luz blanca, que me iluminaba y me decía tranquila, tranquila, estoy contigo, claro tú notabas esa luz que te rodeaba, sí, ahí entendí que yo tenía un don, claro porque yo veía pues la gente que había fallecido, las almas, las personas antes de fallecer que venían y se despedían de mí, y bueno, cosas buenas, cosas malas.

Las cosas buenas y las cosas malas quedan también pegadas a nuestro campo energético. Totalmente, hay cosas buenas que llevamos, las personas, bueno pues que tienen el alma pura, que tienen un campo energético bueno, que han hecho acciones buenas ahora, que tienen un karma bueno, entonces tienen cosas buenas, ángeles buenos, energías buenas, las que de vidas anteriores llevan un mal karma, o hacen ahora acciones malas, pensamientos negativos, como siempre,