Rueda asumió el reto de suceder a Alberto Núñez Fijó tras cuatro mayorías absolutas, así que conoce muy bien al actual presidente del PP, del que fue vicepresidente durante una década y consellero de Presidencia, Justicia y Administraciones Públicas, también de Turismo.

En estos dos años ha marcado ese estilo propio que le ha permitido diferenciarse de la larga sombra de su antecesor, mucho menos institucionalista y mucho más pegado a la calle.

Los que en Madrid pensamos que sería un presidente gris porque siempre había optado por un perfil bajo, hasta ese momento nos equivocamos de plano.

Rueda conoce la política municipal, pues fue concejal de su ciudad natal, Pontevedra, entre 1995 y 1999, y siempre ha estado vinculado al PP gallego, al que llegó desde las nuevas generaciones y del que ha sido secretario general y hoy es presidente.

Casado y con dos hijas, tiene 56 años, es funcionario y le gusta el deporte.

Es habitual verle participar en carreras populares, hacer rutas en bicicleta o encuentros moteros, aunque esto último realmente no le cuesta porque se dé buena tinta que le gustan mucho las motos y, de hecho, tiene una de gran cilindrada.

A Alfonso Rueda le gusta la política nacional, es un defensor de la transición en estos tiempos y no rehúye ningún debate, por eso hoy está aquí en el Club Siglo XXI.

Espero que esta presentación le haya hecho justicia, porque mañana presenta en Coruña a mi compañero en ABC, Juan Fernández Miranda, y me arriesgo a que le pase factura.

Buenas tardes, muchísimas gracias.

Empiezo por los agradecimientos en la mesa, gracias a Ana por su presentación.

Dile a Juan que puede estar tranquilo, si tengo que corresponder a la presentación que me acabas de hacer tendré que esmerarme y mucho, por lo tanto, para mí es un honor presentarlo mañana en Coruña y le agradezco muchísimo lo que has dicho.

Podría decir que no puedo estar más de acuerdo.

En líneas generales, creo que has acertado.

Muchísimas gracias a Paloma y gracias al Club Siglo XXI, que comprenderán que para mí es un inmenso honor estar en este club, es la primera vez.

Yo recuerdo durante tantos años lo que supuso el club, lo que supuso lo que aquí se hacía y la trascendencia y la proyección que tenía.

Creo que hay un ejemplo que lo define todo.

En este Club Siglo XXI, Manuel Fraga presentó a Santiago Carrillo.

Eran épocas mucho más difíciles que ahora, probablemente, y no digo que éstas sean fáciles en absoluto.

Pero ese símbolo, ese ejemplo que dieron en aquel momento de estar construyendo algo fundamental que parecía complicadísimo, casi imposible y que a mí me tocó con una edad, como se puede imaginar, mucho más joven que ahora, yo tenía esa sensación.

Por supuesto, alejado de todo lo que significaba la política, pero me daba la sensación de que estaban construyendo algo importante y que había una reconciliación.

Lo digo porque ahora que algunos se empeñan en todo lo contrario, va a ser que eso no valía nada, que lo que valía era lo anterior.

Las dos Españas que empezaban a unirse por cinco, ahora parece que vuelven a reivindicarse por algunos.

En mi opinión, creo que el Club Siglo XXI representa todo lo contrario.

Esa unión casi mágica entre sensibilidades muy diferentes por un objetivo común, que es el que nos ha llevado a la época más próspera de España, sin duda, en muchísimo tiempo, y que vino de una reconciliación y de una unión y de uno superar muchas diferencias, incluso personales, en lo que, insisto, creo que algunos, y de eso me gustaría ahora hablar brevemente, algunos se empeñan en decir que aquello no valía de nada y que lo importante era la división anterior de la que veníamos.

Gracias, por supuesto, a Álvaro Nieto. Va a dirigir el debate y espero que sea benévolo también en...

Bueno, no tiene que ser benévolo, tiene que trasladar las preguntas simplemente.

Y yo lo que voy a intentar, y con esto entraría en materia, es, dentro de este formato complicado para mí, también es la primera vez que hay una comida rápida, creo que está bien, además, y casi pone a prueba al ponente, comer rápidamente mientras ustedes se están comiendo, hacer una intervención.

Todo el mundo dice que va a ser breve. Yo voy a cumplirlo, porque tenía aquí un guión del cual los que están en la mesa, ustedes no, porque están en la mesa verán que hay muchas cosas tachadas, para intentar ser especialmente breve.

Y en un momento como el que estamos viviendo, creo que las preguntas y lo que podamos transmitir detrás de las preguntas van a ser especialmente importantes. Ya, última cosa, aprovecho para...