El alto precio que paga Rubén Gisbert por ser libre

Queridos amigos, bienvenidos una vez más al canal del coronel, a vuestro canal. Hoy tenemos un programa especialísimo dedicado a Rubén Gisbert. Y hablar de Rubén Gisbert es hablar de una revolución que nos hace mucha falta, mucha falta, si queremos seguir manteniendo un sistema democrático en España y en Europa, pero también es hablar de libertad, de libertad, de libertad, de libertad, que significa libertad de opinión, libertad de expresión, porque creer verdaderamente en la libertad de expresión significa ser capaz de respetar otras opiniones, aunque no coincida absolutamente para nada con nosotros.

No significa que tengamos que oír a todo el mundo, como os digo, en democracia todos tenemos derecho a opinar, pero no tenemos ninguno la obligación de escuchar. Podemos escuchar a quien nosotros queramos verdaderamente, no a quien nos imponga y por tanto, como os digo, hablar de Rubén Gisbert es hablar de democracia y es hablar de libertad, que está todo directamente relacionado.

Como decimos siempre, ¿Rubén tiene la verdad absoluta? Pues seguramente no. ¿Tiene razón en todo? Pues seguramente tampoco, como ni la tengo yo, ni la tenemos ninguno de nosotros, ni todos tenemos la verdad absoluta en nuestra cabeza, ni en nuestras palabras, ni tampoco tenemos por qué imponer absolutamente nada a nadie, que de eso se trata además, de estar en contra del proselitismo descarado que pretenden algunos de esas narrativas machaconas que nos tratan de meter permanentemente en el cerebro. Últimamente han pasado muchas cosas relacionadas con Rubén, que nos irá contando, y sobre todo ese acoso que ya ha empezado a recibir de una manera más intensa, no es que lo haya dejado de recibir nunca, precisamente por ese carácter revolucionario de pretender mejorar la sociedad actual, que ya vemos cómo nos estamos hundiendo, a pesar de que son muy astutos quienes están hundiendo la sociedad y son capaces de, a pesar de todo, mantener un porcentaje importante todavía de la población a su lado, pues manipulada, engañada, sobornada, subvencionada, de una forma o de otra, y precisamente también de todo eso vamos a hablar con Rubén Gisbert.

Como os digo, un programa muy especial en el que hablaremos de muchos temas nacionales e internacionales, que Rubén sabéis que está al tanto de todo, sabéis que tiene un canal, un programa excelente desde hace ya muchísimos años, que hay que seguir, porque hace un análisis estupendo permanentemente de todas las noticias nacionales e internacionales. Así que vamos a darle paso aquí a Rubén. Rubén, bienvenido una vez más a este tu canal, tú eres el responsable de que este canal exista, así que ¿qué te voy a contar? Sé que estás muy cansado porque has pasado días complicados, has estado de viaje, nada más llegar te fuiste a Barcelona que diste una conferencia que llenaste completamente la sala y el cansacio se va acumulando, así que te agradecemos enormemente el que has tenido la diferencia de estar aquí en el canal. Así que buenas noches Rubén y cuando tú quieras.

Buenas noches, colonel. Bueno, estoy quizá no con toda la energía que me gustaría, pero yo no me canso, no me canso y no me pienso cansar mientras lo que haya que hacer bajo mi punto de vista sea el cumplimiento de un deber. Y has dicho un par de cosas que para mí son el cumplimiento de un deber, desde luego sí que quiero aclarar nuevamente que yo no pretendo mantener nada que no tengamos, como no tenemos ni un régimen de libertades ni un régimen democrático, lo que hay que hacer precisamente es una ruptura o una reforma o un camino en el cual vayamos desde lo que hemos venido y ha fracasado, pero para eso primero tenemos que conocer qué es lo que ha fallado e ir a unos puntos de convicción de lo que queremos y de lo que consideramos que es lo mejor para todos.

Lo de respetar todas las opiniones también es importante matizarlo, creo. Yo no respeto todas las opiniones, yo respeto el derecho de todo el mundo a emitir su opinión sin censura previa, pero para respetar tu opinión depende del contenido de tu opinión, porque y de hecho cada vez más, como dice un profesor de filosofía con un gran vídeo que se ha hecho viral, hay opiniones estúpidas, hay opiniones racistas, hay opiniones totalitarias y lo importante es que tengamos claro algo fundamental y es que como todo lo que hemos conocido hasta ahora tiene puntos que no son lo que nos habían dicho y hace aguas, la defensa de esas estructuras políticas nacionales e internacionales es cercenar aquello que hasta ahora nos había vendido como que nos correspondía o que lo habíamos conquistado. No nos lo hemos conquistado en Europa, desde luego se nos ha concedido y a voluntad quien concede puede quitar, quien contrata puede quitar.