"Amor": el Haneke más conmovedor y humano

• Tito-Charly
• Jue, 22/03/18 20:05

Gracias por hablar de esta obra descomunal del cirujano Haneke. Adoro su cine, realista y cocido a fuego lento. Tiene algunas obras más flojas pero Amor es para un servidor su mejor film. Una puñalada al corazón. Adoro el cine de autor y más intimista, adoro este cine profundo y minimalista pero a la vez grandioso. Me gusta su Podcast y los descubrí hace poco. Por favor algún día podían hablar de Toni Erdman, de cualquier película de Xavier Dolan, Jarmusch, y sobretodo de los grandes maestros Tarkovski o Bergman. Un abrazo

• Jose Velasco
• Sáb, 10/03/18 12:14

Una cosa más, que acabé mi anterior comentario de forma abrupta. Independientemente de esa resolución del film un tanto polémica, son realmente bonitos los tres últimos minutos donde se plantea de una forma poética el suicidio de él y luego esa escena final donde la hija recorre la casa, pasando por el dormitorio de sus padres, sentándose finalmente en el salón. Cómo se siente ese vacío... esa casa que tenía vida propia y luego queda vacía y muerta... Impresionante.

• Jose Velasco
• Sáb, 10/03/18 10:38

¡Hombre! Haneke... Un director muy interesante pero para mí un tanto sobrevalorado. Sus propuestas son originales y ciertamente fuerza al espectador a ser partícipe, a implicarse en el texto fílmico y reflexionar sobre ello, aunque en mi opinión es un manipulador nato y muchos films me dejan una sensación de vacío. Por eso, a veces digo en plan de broma "eres más inútil que una película de Haneke". Es una exageración pero un buen ejemplo sería "Funny games" (también "El séptimo continente"). Se veis "El incidente", de Larry Peerce, se trata de una película del mismo calado que "Funny games", pero la propuesta es mucho más interesante. La de Haneke es someter al espectador a casi dos horas de impotencia brutal para encima no aportar mucho más. Juega con la fascinación que despierta lo macabro, y poco más. Por eso digo que es un manipulador. Ahora bien, en "Amor" nos olvidamos de todo esto. Sin entrar a valorar si es una obra maestra o no, lo que sí que resulta es ser una película necesaria. Es una película sobre la vejez, sobre el duelo que supone la aparición de una enfermedad muy grave (por ejemplo, se ponen fragmentos de esta película en cursos, de la rama de enfermería, destinados a la labor del cuidador), y sobre el amor de verdad. Ese amor comprometido que mira las cosas a la cara y que nunca abandona a la persona amada. Y es aquí por lo que el final me parece forzado (manipulación), no muy creíble, para dar pie a jugar con el espectador y hacerle pensar si se trata efectivamente de un acto de amor o de que ha perdido la cabeza. No, Haneke, conmigo no. Las reflexiones sobre esta película ya las habías planteado maravillosamente bien antes de ese final.