Description of #AvisameCuandoLlegues- Hannah Anderson
Tras la muerte de Sarah Everard en 2021, #AvisameCuandoLlegues se convirtió en un movimiento viral en todo el mundo. El lema, pretendía sensibilizar sobre la vulnerabilidad que sienten las mujeres cuando salen solas a la calle. Cada episodio de esta apasionante serie sigue el caso de una mujer inocente a la que secuestraron, agredieron o incluso asesinaron mientras iba sola por la calle. En varios de ellos, son las propias supervivientes quienes nos cuentan su historia, con sus propias palabras. Recreaciones, emotivas entrevistas con los seres queridos, registros telefónicos y otras pistas digitales que las autoridades utilizaron para resolver el caso son el hilo conductor de estas historias. En cada episodio, se exploran todos los posibles sospechosos, intentando mantener vivo el misterio hasta el último minuto, cuando se atrapa al verdadero autor.
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Un caso aterrador de asesinato y secuestro ha sacudido a la comunidad del lago y la policía está revisando mensajes y redes sociales buscando respuestas.
Ese día íbamos a quedar.
Pregunté si iba todo bien y no recibí respuesta.
Hey, tenemos un problema.
Venga, no tiene gracia.
¿Dónde estás? Habíamos quedado.
No quería creérmelo.
¿Habrían secuestrado a mi hija? Jamás lo habría imaginado.
¿Qué está pasando? ¿Dónde está mi hija? No hay forma de entenderlo. Es abrumador y aterrador.
Es el caso más tremendo, difícil e inquietante que he investigado.
Cada año desaparecen 200.000 mujeres en Estados Unidos.
Desaparece una joven tras salir de un bar con un desconocido o mandó un mensaje de ayuda a una amiga.
¿Qué mujer no ha llevado las llaves como arma? Es el aterrador secuestro.
De las secuestradas, muchas no sobreviven.
Han encontrado el cuerpo desnudo de una mujer.
La joven ha sobrevivido de milagro.
Todas hemos sentido que alguien nos vigilaba.
Hay una crisis alarmante de violencia, secuestros y asesinatos de mujeres inocentes.
El asesinato ha tocado la fibra a miles de mujeres.
Esto ha iniciado un movimiento viral.
Se ha iniciado un movimiento mundial de mujeres que comparten miedos.
Toda mujer ha mirado hacia atrás y acelerado el paso.
Están unidas con el hashtag AvísameCuandoLlegues, una frase habitual para las mujeres.
Se ha convertido en nuestro lema.
AvísameCuandoLlegues, Hannah Anderson.
East County, San Diego, 2013.
La familia Anderson.
Estábamos muy unidos.
Lo hacíamos todo en familia.
Acampábamos, hacíamos senderismo, nos divertíamos juntos.
Hannah siempre fue muy deportista.
Hizo baile y gimnasia durante casi todo el instituto.
Era la típica adolescente.
Pasaba mucho tiempo con el móvil.
Pero eso... eso es lo normal.
Bueno, no hacía nada malo con el móvil.
Solo se mandaba mensajes y bromeaba con sus amigas y hablaba sobre chicos o lo que fuese.
Hacía sus cosas.
Y yo le reñía cuando no me gustaba lo que hacía.
Y cuando traía a algún chico, le daba la brasa.
Era... era la típica relación padre-hija.
Mi primera impresión de Hannah fue que era...
Igual que yo, igualita.
Éramos unas locas escandalosas, divertidas, charlatanas.
Nos gustaba ser el centro de atención.
Todo era perfecto.
Nos rotamos la cara.
Hacía baile y gimnasia y era animadora.
Tenía una buena vida.
Sí, siempre sonreía y estaba alegre.
Siempre estábamos juntas.
Nos escribíamos las 24 horas.
Quedábamos después de clase.
Íbamos a su casa o a la mía.
Éramos inseparables.
Con Ethan igual.
Estábamos muy unidos.
Era el niño más gracioso del mundo.
Cocinábamos, hacíamos vídeos, bromas.
Ethan era valiente, muy valiente.
Iban a pescar y los chicos no podían ni poner un gusano en el anzuelo.
Y él iba y ponía todos los debos y luego sacaba los peces.
Es que era... era un tesoro.
Tina ayudó a muchísima gente.
No solo practicaba medicina holística, sino que era buena amiga de mucha gente.
Tina era una persona increíble.
Me daba consejos, hablábamos.
Era casi como una segunda madre.
Yo básicamente me dedicaba a trabajar y éramos una familia muy dinámica.
Vivíamos en una urbanización cerrada y la gente que conocíamos allí era buena gente, así que nos sentíamos muy seguros.
Los Anderson tienen un amigo, al que conocen desde hace casi 20 años.
Se llama Jim DiMaggio, pero los niños lo llaman Tío Jim.
Conocí a Jim cuando trabajaba en telecomunicaciones en San Diego, en 1996, y él era un subcontratista de la empresa.
Así nos conocimos y nos entendimos desde el primer día.
Era gracioso, era alegre, siempre estaba dispuesto a ayudar.
Cuanto más nos veíamos, más venía a casa y hacíamos barbacoas, íbamos de acampada, de caza, de pesca.
Se integró, se volvió uno más de la familia.
Estaba en el hospital cuando nació Hannah y también estuvo presente en el nacimiento de Ethan.
Creo que Jim quería tener una familia y tuvo un par de relaciones serias, pero por lo que sea, no llegaron a cuajar.
Éramos como su segunda familia.
En 2013, Hannah y Marisa están buscando cosas divertidas que hacer los fines de semana.
Hannah y yo éramos adolescentes, intentábamos pasarnos lo bien.
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