#bienestaryotrasyerbas #BYOY Germán De Dio

Hermán, buenos días, ¿cómo andás? ¿Qué haces, Jardito? Buen día, ¿cómo estás? ¿Se viene escuchando bien hoy la columna? Perfectamente.

Si escuchan ruido de pajaritos es porque justo estoy acá en un parque, para los que conocen acá en Quilmes el Museo de Transporte, no llegaba a casa y digo, bueno, me meto en el parque para que aunque sea se escuchen pajaritos, no se escuche tanto auto y ese tipo de cosas.

Es muy natural la columna de hoy.

Bueno, a ver, pretendo con las personas que se sienten identificadas con el tema de la columna, esas personas que se cansaron de andar complaciendo a los demás, se cansaron de andar complaciendo a todo el mundo, pretendo darles paz, una manera de poder estar mejor con lo que les está pasando.

De hecho, vamos a terminar así.

Pero sí, lo que voy a compartirles quizás genere un poquito de incomodidad o un poquito de molestia porque van a descubrir un poco acá en esta columna las razones profundas de por qué les está jodiendo tanto esto y por qué se cansaron.

Entonces, si se sienten un poquito incómodos con lo que voy a decir, sepan que es normal, pero que vamos a terminar bien y vamos a terminar todos amigos como siempre.

Quiero aclararle eso a la gente.

¿Por qué te digo esto? Varias razones.

La primera, si vos sos una persona que te cansaste, vos fíjate que las personas que se suelen cansar, no sé si te ha pasado a vos que por ahí alguien te dice que venga y te diga algo, esto de que me cansé de siempre estar para los demás y que nunca está y cuando yo necesito nadie está.

¿Te cuento cómo me siento? Dale, ¿querés contarme vos? Un calificativo.

Buenudo.

El buenudo, acá está.

Ese es el término que yo me digo cuando me digo ¿por qué tan buenudo? Me pasa siempre eso.

Me encantó.

Esta columna va para todos los que se sientan los buenudos, las buenudas.

Va para eso.

Si te sentís el buenudo o la buenuda, quiero decirte dos cosas que te van a dar cierta gana de apagar la radio y no escuchar la columna.

La primera.

Se acaba la audiencia.

La primera razón.

Esto que estabas haciendo no lo estabas haciendo desde un lugar puro de dar y de amor.

Lo repito porque esto te va a partir el pecho primero.

Esto que estabas haciendo y que capaz que viviste haciendo por los demás no lo estabas haciendo desde un lugar puro y desde un lugar de dar desde un lugar puro de dar y de amor.

Y voy a explicarte por qué antes de que te enojes antes de que se enoje la audiencia los que se sientan buenudos y buenudos.

Voy a recordar algo que hemos hablado muchas veces que es lo siguiente.

Todos los seres humanos en el fondo somos nenes chiquititos que lo que queremos es ser amados vistos, valorados respetados aceptados por lo que somos primero por papá y mamá cuando somos chiquititos y después eso se traduce a todos los vínculos.

¿Por qué estoy contando esto? Porque esto que capaz que vos en algún momento de tu vida te jactaste como una gran virtud vos sos la persona que está escuchando de dar para los demás, de estar para los demás, de siempre andar haciendo quiero decirte que esta gran virtud de la que te jactabas era en realidad un mecanismo de supervivencia y de adaptación para poder lograr que te amaran que te vieran, que te valoraran que te respetaran fue un mecanismo de supervivencia que de tanto hacerlo se convirtió en una parte de tu personalidad de la cual hoy estás podrida, podrido me cansé de estar para todo el mundo me siento el agüenudo pero quiero que sepas lo siguiente el problema no son los demás el problema es que esto fue un mecanismo que nace desde el miedo para poder ser amado visto, valorado, respetado lo que fuera esto que estábamos diciendo esto condicionó tu personalidad y como durante muchos años de tu vida fuiste al dar, al hacer, al estar para los demás una parte de tu mente se calmaba con eso estoy recibiendo este amor estoy recibiendo este reconocimiento lo seguiste haciendo ¿qué es lo que pasa? de alguna manera esto es una forma de negociación de alguna manera y esta es la parte que duele y que jode estabas comprando amor estabas comprando ser visto estabas comprando ser valorado estabas comprando ser aceptado por eso ahora cuando no lo recibís te enojas