BIENVENIDOS AL NORTE ASTURIAS (88.70) - LUCAS ÁLVAREZ (CICLISTA) 13-05-25

Pues no vamos a bajar la intensidad porque la próxima media hora vamos a hablar de bicicletas, vamos a hablar de esfuerzo, de autosuperación, de un ejemplo, de un ejemplo que cuando algo se mete en la cabeza de una persona que tiene fuerza de voluntad, pues va con ello hasta el final.

Y de ello nos va a hablar el protagonista, Lucas Álvarez. Buenas tardes. Buenas tardes, ¿qué tal? Bueno, pues encantado de saludarte porque nos hemos vuelto a encontrar gracias a esta entrevista después de unos años. Así que fíjate qué sorpresa. De lo que vamos a hablar hoy y de la última vez que nos habíamos visto. Pero una sorpresa, Lucas, muy agradable. Y lo que te decía, cuando algo se mete en la cabeza y quiere ser, tiene una idea, quiere hacer algo y ahí te estás rondando. Al final te embarcas en esa aventura.

Que no es otra que el intento que hiciste de dar la vuelta al mundo en bicicleta, que no pudiste completar, pero que te llevó a recorrer unos cuantos países y a vivir muchas situaciones. Sí, efectivamente. Como bien has dicho, no lo llegué a completar, pero bueno, el viaje no por ello fue peor, lo disfruté igualmente. Eso fue un fallo de cálculo, por mi parte, de más optimista. Pensar que fuera a acabarlo con el tiempo del que dispuse, también es verdad que creí que iba a contar con más tiempo. Con lo que tuve, pues lo hice. Lucas, tú eres un hombre que empezaste a andar en bicicleta un poco en serio hace cuántos años, 10, 12? Sobre 10 años.

Un día dijiste, bueno, vamos a hacer ejercicio con la bicicleta, vamos a probar. No, no. Yo siempre fui deportista y un día me dio por probar la bici de mi padre de carretera y corría. Siempre me ha gustado correr y como empecé a gustarme la bici, entonces me embarqué en el triatlón. Probaste la bici de tu padre como cuando le coge un chaval las llaves del coche, ¿no? Bueno, no hace falta el carnet para esto. Sí, un poco así, realmente. Me acuerdo que fueron un par de salidas con ella y decirme, bueno, pues voy a empezar, no me disgusta, y empezar a la carretera, bueno, típica que hacemos tantos de Oviedo a Polasiero.

Y de ahí dije, bueno, porque no sé nadar, pero me puse a aprender y al final, pues, me metí mucho en el mundo del triatlón y más adelante salió la idea de viajar en bicicleta, pero vine por ahí. El triatlón, pues, un deporte exigente donde los haya. Has tenido participación en varias pruebas ya, ¿no? Sí, sí, sí. Desde que empecé, no recuerdo en qué año empecé, sí, hace nueve, ocho años, en el equipo del Centro Asturiano de Oviedo. Según mis notas, sí, sobre ocho años, sí.

Por ahí, no, en el calendario asturiano procuro correrlas todas, el calendario de badlones y triatlones. Este año haré mi segundo Ironman, llevo, creo que seis medios Ironman, y por el medio de sprints olímpicos, un montón, ya no los cuento ya.

Eres entrenador en el Centro Asturiano de Oviedo, ¿no? Sí, sí, soy entrenador de la escuela de triatlón que tenemos allí, con críos. La verdad es que estamos muy contentos con ello y sí, bueno, en general, pues, es una tónica que intento seguir en mi vida en general. Me gusta un tema, pues, oye, si me gusta, pues, aprendo de él y me hice el curso de entrenador y justo con la buena suerte de que empezamos un proyecto, eso, de la escuela, coincidió y ahí sigo. Lucas, tu primer viaje, digamos ya importante, un gran viaje, por llamarlo de alguna manera, ¿fue cuando te dio por hacer la Luta de la Plata? Sí, sí, mi primer viaje, pero importante o no importante, porque hasta entonces no me había dado. Bueno, o tu primer, eran trayectos cortos.

Bueno, lo más largo que he hecho hasta entonces fue mi padre es de Balderas, en León, que está a los, creo que es 215 kilómetros, no me acuerdo, y ha habido un par de veces de que íbamos al pueblo, pues, ellos llevan en coche y yo llegaba en bicicleta, pero bueno, eso podemos catalogarlo de entrenamiento largo, pero un viaje como tal, pues sí, de