CARAVACA RADIO- Paco Fernández Ruíz nos presenta su nueva muestra 'Encuentros', que acoge el Museo Arqueológico

Uno de los planes puede ser asistir a conferencias, a actividades culturales, a exposiciones como la que te vamos a comentar esta tarde.

Tenemos una exposición con el título Encuentros en el Museo Arqueológico de Cejín.

Hace unos días se inauguraba esta exposición y tuvo un gran éxito de participación.

Son los trabajos de Paco Fernández Ruiz, un joven pintor cejinero que esta tarde nos acompaña.

Con él queremos conocer su trabajo, conocer esta exposición y que nos cuente cómo es la vida de un pintor.

Buenas tardes, Paco, ¿qué tal? Hola, buenas tardes.

Digo yo que ahora estamos en unas buenas fechas para visitar exposiciones.

Siempre en Semana Santa nos movemos más, asistimos a pueblos, a procesiones, pero también a las salas de exposiciones.

Y en nuestros pueblos, tanto en Cejín, en Caravaca, en Morataya, en toda esta zona, pues tenemos muchos lugares también.

En Cejín tenemos el Museo Arqueológico, que por cierto es una sala muy bonita, hace unos días.

¿Cuándo fue la inauguración? Hola, lo primero, gracias por invitarme.

Encantada de que estés aquí.

La inauguración creo que inauguramos, si mal no recuerdo, creo que fue el 24 de marzo.

En marzo.

El 24 de marzo, en las salas del Museo Arqueológico, como dices.

Bueno, son unas salas temporales que se inauguraron prácticamente ahora como dos años y medio.

Fue en febrero de 2022 cuando se inauguraron estas nuevas salas y la verdad es que están muy bien adecuadas.

Y al contar con dos salas, pues puedes jugar con los diferentes espacios e intentar que cada sala table de una cosa o de otra idea.

¿Cómo has montado tú la exposición? Porque hemos visto tus trabajos de óleo en una sala, los bocetos en otra sala, ¿no? Sí, bueno, esta exposición surgió un poco de manera que no contaba con ella.

Me ofrecieron la fecha y decidí que sería interesante juntar los últimos retratos que había hecho desde 2021, que realicé una exposición también sobre retrato, hasta ahora.

Cuando me puse a echar cuenta y ver cuántos retratos disponía, vi que solamente podía ocupar una sala, que quedaba bien formada, pero necesitaba ver cómo podía contar algo más en la otra sala.

Que podía contar la parte o la trastienda de lo que hay detrás de una obra de arte o de una pintura.

Que todo ese proceso de aprendizaje, de boceto, en donde yo puedo practicar, ver artistas que me gustan, intentar copiar su obra para aprender sus procedimientos y técnicas.

Y me parecía muy interesante que, por ejemplo, en esa sala se vieran esos bocetos y esos estudios y que luego, por ejemplo, en la sala ya principal, entre comillas, se pudieran ver los resultados finales.

Que son extraordinarios. Me imagino que te habrán llegado cantidad de comentarios.

Bueno, el día de la inauguración, que yo por cierto pude asistir a la inauguración, pero había tantísima gente que era imposible casi disfrutar de la obra.

Después imagino que habrá ido la gente más tranquila, poquito a poco, porque la obra de arte hay que hacerlo así.

En varias ocasiones incluso se puede visitar.

Sí, la verdad, como dices, en la inauguración yo no esperaba tantísima gente.

A ver, contaba con que, bueno, gente, sabía que iba a ir gente, pero tal magnitud no lo esperaba.

Eso de que estuvieran las dos salas llenas de gente, el zaguán que una de las dos salas y luego también salía gente hacia la calle.

Y luego la calle.

Sí, o sea, yo me quedé alucinado. No esperaba tanta gente.

La verdad, se me pasaron el rato volando entre saludar a uno y a otro. Fue increíble.

Y bueno, la verdad… Te decía que es bueno volver, ¿no? Sí.

Porque claro, efectivamente, en ese momento de la inauguración, entre conversaciones, saludos, etcétera, se pasa el tiempo, pero hay que volver a las salas para recrearse más en la pintura, ¿no? Yo es como digo, la inauguración es para ir a saludar.

Yo creo que el encuentro con el arte requiere de mayor calma, de mayor tranquilidad, de ir a ver la obra y dedicarle a cada obra el tiempo que creas que sea oportuno o lo que esa propia obra te incite a ti a quedarte contemplándola.

Porque lo que pretendía también con esta exposición es que se generara una especie de diálogo entre modelos, entre la persona que va a ir a ver la exposición.

Entonces, siempre recomiendo que si te gusta ver la obra, vaya un día.

Y si te apetece, vaya otro, porque la vas a ver con diferentes ojos.

Ya no va a ser la primera vez que miras la obra, ya te va a resultar familiar.

Te va a parar en otros detalles, te va a parar en otras texturas, en otras cosas que no te gustan.