Cazadores de enigmas T2: Tutankamón,acabar con la maldición

Tutankamón, de entre los cientos de gobernantes de las 32 dinastías que han reinado en Egipto, probablemente sea el faraón más famoso de todos.

Sin embargo, su reinado, que apenas duró nueve años, fue uno de los más cortos en la historia de cualquier dinastía.

Hoy en día, cuando se habla de los gobernantes del antiguo Egipto, la gente piensa inmediatamente en Cleopatra, Ramses II y, por supuesto, en Tutankamón.

Tutankamón debe su fama a una destacada expedición encabezada por el egiptólogo Howard Carter y su adinerado mecenas Lord Carnarvon en los años 20.

Durante años, estuvieron buscando la tumba, invirtiendo gran parte de la fortuna de Lord Carnarvon, y justo cuando estaban a punto de rendirse, el descubrimiento de un simple escalón de piedra llevó a Carter a hacer un hallazgo sin precedentes.

Estaban asombrados por el increíble estado de conservación de la momia de Tutankamón, la riqueza de sus adornos, la lujosa máscara funeraria, el sarcófago tan bien trabajado y los más de 5.000 objetos allí hallados.

Lo sorprendente es que esta tumba, de una riqueza arqueológica excepcional y dedicada a un faraón de poca relevancia, permaneció intacta ante los saqueadores de tumbas.

Más de 3.000 años después de la muerte del gobernante, la gente conocería el nombre de Tutankamón, lo que dio fama repentina al faraón fue una famosa maldición.

La muerte caería sobre quien osara perturbar el lugar de descanso del soberano fallecido.

Y para el equipo de Howard Carter que abrió la tumba en 1923, eso dejó de parecer una simple leyenda.

Los periodistas afirmaron que los arqueólogos no prestaron atención a una advertencia grabada en la entrada de la tumba.

La muerte le llegará con alas veloces a aquel que perturbe el descanso del rey.

Se dice que 27 personas cayeron víctimas de la maldición de Tutankamón.

¿Se trata de una fuerza paranormal, una maniobra de relaciones públicas o algo real? A lo largo de los años, tanto los creyentes como los escépticos han intentado entender esta serie de extrañas muertes.

Las teorías van desde envenenamiento por arsénico y neumonía aspirativa hasta humo venenoso que pudo haberse desarrollado en la tumba.

Entonces, ¿se trata de un mito o una realidad? A través de testimonios de expertos, gráficos generados por ordenador y recreaciones dramáticas que reviven el pasado, descubriremos la historia de Tutankamón.

Desde el esperado hallazgo de su tumba hasta la maldición que elevó a este faraón desconocido a la fama mundial.

Esta es la historia de Tutankamón, uno de los faraones más enigmáticos de la historia y el misterio más fascinante del siglo XX.

Cazadores de enigmas, Tutankamón, acabar con la maldición.

Egipto, la tierra de los faraones.

Cuna de una de las civilizaciones más grandes y conocidas de la historia de la humanidad.

Y hogar de algunos de los restos arqueológicos más asombrosos del mundo.

La Esfinge de Giza.

La Pirámide de Keops.

Y, por supuesto, el famoso Valle de los Reyes, donde se encuentra la tumba de Tutankamón, descubierta en 1922 por el egiptólogo Howard Carter.

Un descubrimiento que fascinó al mundo entero, y en particular a un chico de 15 años llamado Georges Rémy.

Años después, cuando Rémy adoptó el seudónimo de Edje, su pasión inspiró Los cigarros del faraón, una de las pinturas más famosas de Tintín, publicada en 1934.

En 1922, la reina Isabel de Bélgica, su hijo el príncipe Leopoldo, y el arqueólogo belga Jean Capar, asistieron a la apertura de la tumba de Tutankamón.

La reina quedó tan impresionada que creó una fundación de egiptología en Bruselas, con Jean Capar como presidente.

Fue al leer Chronique d'Egypte, una revista creada por Jean Capar, cuando Edje comenzó a sentirse fascinado por el antiguo Egipto.

Edje basó el personaje del profesor Bergamot de las siete bolas de cristal en Jean Capar.

También reprodujo varias de las decoraciones de la tumba de Tutankamón.

Por ejemplo, cuando Tintín es drogado y empieza a alucinar, una de las escenas imita el diseño de un pequeño trono encontrado en la tumba.

En las décadas de 1920 y 1930, el misterio de la maldición del faraón Tutankamón fascinó al mundo entero, y Edje no fue el único artista que se inspiró en ella.