CBP486 Leclerc, un general audaz

¿Por qué no hay que votar a Casus Belli? ¡Eso, eso! ¡Ni un voto! ¡Muerte a Casus Belli! ¡A la hoguera! Peleles, no les votes.

Falso ídolo.

Porque no pertenecen a un gran medium de comunicación.

¡Desarrapado! ¡Pobretones! ¡Muerto de hambre! Ni ponen reggaetón.

¿Te estás metiendo con el quevedo? ¡Pijos! ¡Melenudos! ¡Metaleros! Porque escuchan a sus oyentes.

¡A esos ni caso! ¡Infelices! ¡El oyente lo que tiene que hacer es oír! ¡Son solo números! Y utilizan ordinales.

¿Ha dicho ordinales? ¡A la hoguera con Issaúl! ¡Pesado! ¡Ordinario! ¡Herejes! Ya has visto lo que dicen nuestros haters, pero como tú eres un vieja guardia, vótanos en los premios E-Vox.

Queremos sentirte, queremos notar que estás ahí.

A partir del lunes 6 de octubre, vótanos desde aquí mismo o desde el enlace que encontrarás al principio del texto de este episodio.

Cuando repasamos la lista de los grandes generales de la Segunda Guerra Mundial esta que tenemos, uno de los que siempre destaca, siempre está en las guinielas, pero que a veces parece un poco metido con un calzador, ahora verás, es el francés Philippe Leclerc.

¿Y por qué está ahí? Pues es solo porque Francia tenga un representante en el club de los grandes militares del conflicto, porque vamos, vamos a ser sinceros, a principio la Francia libre de De Gaulle, bueno, Leclerc era su hombre de confianza, ya lo veremos, uno de sus hombres de confianza, pues era más un incordio para el resto de aliados que otra cosa.

Vale, vale, los galos irreductibles, un puñado de hombres que se negaron a doblegarse a Alemania, que lucharon con armamento prestado y tropas coloniales, pero hasta el punto de que, bueno, hasta bien entrado el 42, a estos mandos aliados a veces les resultaba más fácil tratar con la Francia de Vichy que con estos irreductibles, así era el laberinto francés.

Así que la pregunta del millón de francos ¿es Leclerc un grande de la guerra por pura cortesía o fue realmente un engranaje clave en la recuperación, por llamarlo de alguna manera, del peso político de Francia? Y hoy nos vamos a dedicar a ver si su leyenda está a la altura de su historia.

Así que paso a revisar los escasos efectivos que aportamos a la causa aliada.

General Antonio Muñoz Lorente, ¿qué tal estás? Buenas tardes, ¿qué hay? ¿Cómo estamos? Pues vamos a ver si nos desemarañas un poco y nos explicas este laberinto francés que yo he llamado, porque es bastante desconocido aquí.

Sí, bueno, es un lío, es un lío tremendo, porque hay el mito de la resistencia, el famoso mito de la resistencia, que es un mito político fundacional posterior a 1945, famoso, los franceses se llaman los franceses se llaman compañón de la liberación.

Toda la clase política francesa posterior a 1945, de alguna manera, se alimentará de eso.

Es realmente el golismo.

Y luego, hay la cosa polémica de qué aportaron los franceses a la victoria aliada.

Los mismos franceses, los historiadores modernos, son muy críticos en ese sentido.

Es decir, aportaron según qué cosas, pero no aportaron otras.

Evidentemente, hubo gente que se sacrificó por Francia contra los alemanes.

Los alemanes los mataron.

Simple y llanamente.

Se los cogían.

Pero luego otra cosa es, luego está Leclerc, que, de alguna manera, se convierte en una especie de icono, de icono militar, de la liberación o del combate de las fuerzas francesas libres primero en África, en Camerún, en Gabón, el Chad, luego en Libia y en Túnez, y luego en la liberación del territorio francés, lo que todo el mundo más o menos conoce, que es la liberación de París, el avance hacia la frontera, Estrasburgo, etc.

Y luego, una breve intervención que tiene en Indochina, y luego su final en Argelia.