La Ciudad ilustrada 22/05/2025

A continuación les ofrecemos la ciudad ilustrada con Francisco Acullo, aquí en Granada FM, la radio cultural.

Que yo pudiera cincelar una estatua, línea por línea, a partir de la severidad de un mármol castro. Angular, áspera, sin curvas moderadas para complacer. Fijar lágrimas en los ojos para hacerlos fulgurar. Y surcos en la ceja, profundos, firmes, incómoda, alta.

No una cortesana complaciente. Los pantalones abultados en las rorías huesudas. Nariz larga, boca larga. Pero, ah, la divina luz de la verdad. La luz que libera a la gente. Ardería sobre ella en una llama constante, a medida que el ocaso dispara un pico blanco en el cielo. Oh Dios, dejarla innominada y ver a hombres llorando que se inclinan y gritan. Suficiente, suficiente.

Sabemos el nombre de tu estatua. Queridos amigos y fieles oyentes de la ciudad ilustrada de Granada FM. Muy buenas noches y bienvenidos al programa cultural de la noche de los jueves. Donde, como es costumbre, desfilarán por nuestro espacio cultural la literatura, las artes plásticas, la poesía, la música. Os habla Francisco Acullo, que se complace en estar con todos vosotros compartiendo lo que nos gusta verdaderamente. Tras la mámpara técnica, está Frank, que se cuida de todos los detalles técnicos.

Al inicio de la edición de hoy, de la ciudad ilustrada, traemos un poema de la poeta de Consul Grave, Kansas, Elia Igleson, que lleva por título estatua. Verán que muy apropiado para la ocasión de hoy y para la invitada de excepción que nos acompaña. Las artes plásticas, como bien saben nuestros oyentes, ocupan un espacio capital en nuestro programa. Pero hasta la fecha no habíamos tenido ocasión de conversar con algún escultor de pro, en este caso, escultora. Donde daremos cuenta de un arte milenario, cuya evolución a lo largo del tiempo y de los gustos estéticos ha sido constante.

En el espacio de hoy tenemos el placer de contar en nuestros estudios con la presencia de la artista Marianne Gélez Lázaro Will, cuyo nombre artístico lo toma del apellido materno Ángel Guildeterra, para simbolizar una profunda solidaridad femenina con su madre, según confiesa la propia artista.

Vive en un ambiente familiar donde el arte será la habitual constante de sus días de infancia.

Comienza sus estudios de arte con apenas 11 años en la Escuela de Arte de Granada.

Tuvo, entre otros maestros, con los que además mantuvo amistad, Aurelio López Azaústre, Julio López Hernández, Domingo Sánchez Mesa o Miguel Moreno, entre otros.

En la Facultad de Bellas Artes de Sevilla, pudo decursar los estudios superiores en la especialidad de escultura desde 1981 hasta 1986. Un título que se completará con el doctorado en la Universidad Autónoma de Sevilla.