Cómo Alcanzar la Semi-Jubilación: Tres Estrategias para Aumentar tu Libertad Financiera

Hola inversores, bienvenidos a un nuevo episodio del Inversor Nobel.

En el episodio de hoy vamos a hablar sobre cómo alcanzar la semi-jubilación a través de tres estrategias para aumentar nuestra libertad financiera.

Dando vueltas al tema de la independencia financiera y la jubilación temprana, llegué a la conclusión de que retirarse antes con cierta independencia financiera no tiene que ser una cuestión de todo o nada.

En este episodio veremos tres estilos de vida que nos permitirán disfrutar de más libertad y flexibilidad financiera.

Exploraremos cómo es posible combinar ingresos activos y pasivos para reducir nuestras horas laborales, trabajar de forma estacional o incluso emprender un negocio basado en nuestras pasiones.

Vamos allá.

Antes de nada vamos a definir la semi-jubilación y sus fases.

La semi-jubilación es una estrategia financiera que permite disfrutar de más libertad y flexibilidad en la vida, sin tener que dejar de trabajar por completo.

¿Y cómo podemos conseguir esto? Pues en lugar de depender únicamente de un ingreso activo, la semi-jubilación combina ingresos pasivos con ingresos activos.

Este enfoque representa una excelente opción para aquellos que ahorramos e invertimos durante un tiempo y deseamos aprovechar esa riqueza para ganar más libertad.

Sencillamente la semi-jubilación es un estado intermedio entre la fase de acumulación de riqueza en la que nos encontramos la mayoría y la desacumulación o jubilación total.

Durante la fase de acumulación trabajamos para cubrir nuestros gastos y ahorrar para el futuro.

En la semi-jubilación ya no es necesario contribuir activamente al fondo de jubilación o fondo de libertad, como me gusta llamarlo, y se puede empezar a cubrir algunos gastos con ingresos pasivos.

Los ingresos pasivos pueden provenir de diversas fuentes, como inversiones inmobiliarias, propiedades de alquiler, fondos indexados o incluso un portafolio de acciones que genere dividendos.

Al retirar un pequeño porcentaje, generalmente entre el 1 y el 2% anual del portafolio de inversiones, se puede suplementar nuestro ingreso activo sin agotar nuestros recursos.

Este enfoque es sostenible y permite que nuestras inversiones continúen creciendo en piloto automático, acercándonos de esa manera más a la independencia financiera completa.

Es importante que el porcentaje de retiro no supere el 4% de nuestra inversión, ya que es el límite establecido según algunos estudios para no quedarnos sin dinero.

Puedes ver más detalles acerca de la regla del 4% y sus condiciones en un artículo del blog titulado ¿Cómo calcular la libertad financiera? En definitiva, adoptar la semijubilación significa aprovechar tanto los ingresos pasivos como los activos, lo que nos permite reducir las horas de trabajo y ganar más tiempo libre sin comprometer nuestra seguridad financiera.

Una de las formas más accesibles y prácticas de adoptar un estilo de vida de semijubilación es reduciendo las horas de trabajo.

Esta opción me parece muy interesante porque permite mantener nuestra profesión actual, aprovechando la experiencia y habilidades que tenemos, mientras disfrutamos de más tiempo libre.

Se pueden reducir las horas laborales, y eso sería una opción ideal para aquellos que desean mantener su carrera pero buscan un mejor equilibrio entre el trabajo y la vida personal.

Muchas empresas están dispuestas a negociar acuerdos de tiempo parcial para retener a empleados cualificados.

Por ejemplo, si actualmente trabajamos 5 días a la semana, podríamos intentar negociar trabajar solo 3 o 4 días.

Esta reducción puede significar una disminución proporcional del salario, pero esta reducción se podría compensar con una pequeña retirada del Fondo de Libertad.

Veamos ahora un caso hipotético para ilustrar mejor esta opción.

Supongamos que Juan gana 100.000 euros al año y decide reducir las horas de trabajo en un 40%.

Esto resultaría en un ingreso anual de 60.000 euros.

Si los gastos anuales son de 70.000, se puede retirar un 1,5% de una inversión de 700.000, lo que equivale a 10.500 euros anuales, para cubrir la diferencia.

De esta manera Juan lograría mantener un nivel de vida similar mientras disfruta de más tiempo libre.

Existen algunos beneficios de esta transición gradual.

La transición de trabajar de tiempo completo a una semijubilación puede representar un auténtico desafío, especialmente si nuestra identidad está fuertemente vinculada a la carrera.

La tiempo parcial ofrece una transición.