Cómo convivir con el estrés y cómo afecta a nuestro cuerpo

Y de tortillas al estrés.

Porque la verdad es que hacer una tortilla te puede llevar cierto estrés.

Ahora, ¿el estrés es bueno o es malo? Porque hay quien nos dice, lógicamente, la mayoría, que es malo.

Pero hay también quien nos dice que el estrés es bueno, que tenemos que tener estrés para que nuestro cuerpo funcione.

La doctora Arancha López Ocaña está con nosotros todos los lunes.

Doctora, ¿cómo estás? Muy bien, estupendamente. ¿Y vosotros? Nosotros maravillosamente bien. Maravillosamente bien.

Martín, deja que te puntualice, porque en cocinando se relaja mucho en la cocina.

Joder, pero en un concurso no te relajas mucho.

Ah, en un concurso. Claro, claro.

Claro, efectivamente.

Todo depende cómo se lleve ese estrés.

Y en casa depende cómo cocines.

En casa depende cómo cocines.

Si empiezas a dejar todo hecho una guarrada y no te va bien, o se te está quemando no sé qué...

No, puede ser un estrés. Exacto.

Vamos a hablar del estrés hoy, doctora.

Tú dices que el estrés es necesario para nosotros.

Bueno, sí, porque además, entre otras cosas, el estrés es una serie de reacciones fisiológicas que nosotros tenemos y que prepara el organismo para responder ante determinados ataques.

O sea, podemos diferenciar también ese estrés agudo.

Quiero decir, a ver, si tú tienes un león delante, tiene que haber una reacción de estrés.

Vamos a decir, hay un estrés en nuestro cuerpo.

Y entonces, ese estrés es beneficioso, porque nosotros tenemos que responder ante determinados peligros.

Luego ya, entre comillas, ¿no? El problema está cuando ese estrés se cronifica y se normaliza, que yo creo que el problema que tenemos a día de hoy es la normalización del estrés, pero el estrés es necesario, porque es esa respuesta que tenemos ante determinadas situaciones que nos pueden poner en peligros, ¿no? Claro, eso es... Y eso es.

Te quiero decir, ahí no tenemos ningún tipo de problema en hacer una respuesta de estrés biológica, o sea, fisiológica, en nuestro cuerpo.

Pues aumenta el cortisol, la adrenalina y así, como es normal.

Y sufrimos esas consecuencias de estrés en el que nuestros músculos se preparan para correr, o sea, o para el ataque, en la que las pupilas se dilatan, la respiración se puede acelerar un poco, que es una respuesta normal a ese estrés agudo que estamos teniendo.

El problema es que estamos sufriendo muchísimos problemas como consecuencia del estrés cronificado y normalizado que tenemos en general en la sociedad.

Pero el estrés es bueno, sí, depende cuándo y en respuesta a qué.

¿Porque el estrés es más psicológico que físico? No, no, no, no, no.

No más físico que físico, son las dos cosas.

Es verdad que la ansiedad es un poco la reacción del cuerpo al estrés.

Entonces, generalmente, una persona que sufre de ansiedad, pues podemos hablar que puede estar estresado, así en general, ¿no? O estresado-ansioso, ansioso-estresado.

Pero también hay una relación física.

¿Qué es lo que ocurre? Que si yo tengo un estrés crónico, sufro de estrés en un periodo largo, como consecuencia de no una respuesta a esa situación de estrés agudo, vamos a decir, voy cronificando y puedo tener luego una serie de sintomatología que es muy variada, que va muy relacionada con el estrés, como puede ser el cansancio.

Miebla mental, que a veces suele decir la gente, procesos de diarrea, de estreñimiento, una alteración de la microbiota intestinal, un descenso de la líbido, aumento de peso, que también va muy relacionado con este estrés a ver, crónico, pero también se sufre, lo que estábamos hablando, un poquito igual de depresión o también de ansiedad.

Quiero decir que hay sintomatología de las dos, tanto físicas como mentales.

Yo pensaba que el estrés lo que te producía era adelgazar, no más que engordar, ¿no? No, no, no, qué va, qué va.

No, no, porque hay una alteración...

No, no, no, eso cuando el estrés mal llevado, el llamado distrés, ¿verdad?, como produce una alteración en las hormonas y neurotransmisores tanto del cortisol como de la adrenalina y en las hormonas también del hambre, generalmente de la leptina y de la grelina, la tendencia generalmente es a coger peso porque retenemos líquidos, también nos apetece comer alimentos de peor calidad nutricional, generalmente cuando uno está así estresado, no come más peras, por ejemplo, suele comer otro tipo de alimentación.