Con tu donación a Zaporeak ayudas a dar más de 2500 comidas al día en Lesbos a los refugiados

Tenemos mañana un evento, tenemos el domingo un Bermú y en ambos hay algo en común.

Uno, que está Eze Hollis, que estaremos los Quiroleros, que estaremos por allí jugando.

Eh… Dos, que estás invitado tanto al evento del viernes, todavía queda alguna entrada.

Puedes adquirirlas en Quiroleros.com.

Y lo del viernes es absolutamente gratuito.

Allí es un pincho pote solidario, un Bermú solidario, y ahí lo que vamos a hacer es cambiarte tu aportación, tu arroz, por un pinchito. Claro.

Y en este caso, para lo del viernes, la entrada… Se supone que esto es un vuelo.

Es el vuelo de Eze Hollis. Claro.

En ese vuelo, habitualmente en todos los vuelos, sobre todo en los largos y antes, te ponían comida, te ponían para comer.

Ahora, en este vuelo nuestro, no solo no te damos, sino que te pedimos comida.

Claro, no va a pasar carrito con gente allá y con azafatos y azafatas entregándote nada.

Vamos a recoger nosotros, porque pensamos que… Lo tenemos prácticamente todos nosotros, somos de esos afortunados, y hay mucha gente que necesita, en este caso, de nuestra ayuda.

Eh… Llevamos diciéndolo.

Este es el arroz solidario para Saporeac.

Hemos querido saludar a uno de sus voluntarios para que nos cuente cómo vamos a recoger este arroz y a dónde va a ir y que nos lo cuenten ellos.

Javier Mendiguchía, voluntario de Saporeac, aquí en Araba, porque Saporeac es muy grande y viene actuando en diferentes puntos.

Saporeac, Araba. Javier Egunon, buenos días.

Egunon Quiroleros, buenos días. Muy buenas.

Estamos aquí con esta iniciativa, tanto del viernes como del domingo, pidiendo a los oyentes y a todos los que van a acudir a ese evento que nos dejen su arroz.

Y, a lo mejor, hay gente que todavía ni siquiera conoce lo que es Saporeac y la labor que hacéis.

Así que, para eso te llamamos, para que nos lo cuentes tú.

¿Quiénes sois? Pues, mira, Saporeac empezó con un grupo de personas en el año 2016, hacía nueve años.

Este grupo estaba por la zona de Oriente Medio y vieron el desastre humanitario que rodeaba a todos los refugiados, a toda la gente que ya desde entonces y ahora también oía de las guerras de Siria, de Afganistán, de persecuciones religiosas.

Y, ante tanto desastre, dijeron ¿qué podemos hacer? Y ellos mismos se respondieron y dijeron pues si nosotros sabemos cocinar, pues vamos a intentar ofrecerles una comida digna.

Y empezaron así, como una cosa sin mayor trascendencia.

Pero luego ha ido a más, ha ido a más.

Y la verdad es que cuando volvieron aquí y contaron lo que hacía, pues era un mensaje que calaba y se fue sumando más gente.

Entonces empezó con mucha fuerza en Guipúzcoa y luego se fue extendiendo.

Y bueno, no es que sea, no es que sea una ONG muy grande, que es una ONG ya reconocida, pero porque actúa fundamentalmente en Euskadi, en Euskadi y Navarra y está ahí centrada.

¿Y qué es lo que hacemos? Pues lo que hicieron desde el principio, dar comida.

Pero esto ha crecido tanto que por dar unos datos, pues por ejemplo, el año pasado, solo en la isla de Lesbos, que es donde nos centramos, pues entraron casi 15.000 refugiados.

Y en el campamento que hay allí para refugiados, pues hay unas 5.000 personas en las que, por ejemplo, por dar un dato, los niños representan la tercera parte de esa cantidad de gente.

Y el año pasado, pues nosotros dimos más de 800.000 comidas.

O sea, tengo por aquí el dato 825.000 comidas.

Esto significa que damos cada día entre 2.500 y hasta 3.300 comidas al día.

Y claro, esto es lo que se hace.

O sea, nos dedicamos exclusivamente a esto.

Comidas con mucha dignidad, con mucho equilibrio nutricional.

Pero lo que es cierto es que para hacer esto necesitamos en la retaguardia aquí en Euskadi, pues trabajar un montón, porque se necesita todo tipo de apoyos.

Desde contribuciones en metálico hasta contribuciones en comida.

Y entonces los voluntarios que estamos aquí, pues nos dedicamos a a intentar tener buenos amigos como sois vosotros.

Y así, pues os acordáis de nosotros y nos invitáis a estos actos tan bonitos como el homenaje de Sijolis y este vermut del domingo.

Y poco a poco, pues en cada acto sacamos medio palet o un palet o lo que sea de comida.

Y a base de muchos puntos de recogida y de muchos actos al cabo del año, pues recogemos toneladas y toneladas y trailers de comida pues para llevar allí hasta esta isla de Lesbos.

Qué suerte, qué suerte tenemos.

La verdad, no somos conscientes.

Fíjate que nos pasamos el día gruñendo por tonterías muchas veces, incluso aquí en el programa, por cosas deportivas, cuando lo realmente importante es la comida.