Cuba: Turismo sexual, el Partido Comunista y México, y las misiones médicas

Cuba, la isla de las jineteras.

Varios videos virales de los últimos días indagan en una realidad de la que apenas se habla en el país, la explotación sexual de menores y el turismo sexual.

Y no se habla, porque durante años el discurso oficialista ha tratado de mirar hacia otro lado en su afán de vender al mundo la imagen idílica de un país que solo existe en la propaganda.

Escuchamos a Carolina, una cubana de 25 años que ofrece servicios sexuales hace más de una década.

Carolina no es un hombre real.

La entrevista fue realizada por el creador de contenido español Juan Dalmau, quien viajó a la isla con la intención de mostrar la vida cotidiana y registró la crisis de los alimentos y la vivienda, el modo en que se sobreviven las calles.

La Cuba, ajena a las postales de la propaganda estatal.

Dalmau no es el único que ha indagado sobre el turismo sexual, los trabajos sexuales o el jineterismo, como se le dice a esa práctica en Cuba.

Pero ¿qué está pasando con el turismo sexual en la isla? ¿Qué hay detrás de esa realidad? Comenzamos así un nuevo episodio donde también estaremos hablando sobre el convenio más reciente del Partido Comunista de Cuba y Morena, el partido mexicano que busca referentes en Labana y también de una nueva filtración relacionada con las misiones médicas cubanas en el exterior.

Esto es Radiografía de Cuba, un videopodcast del TOQUE en alianza con la Fundación Konrad Adenauer.

Aquí revelamos la historia y el contexto que rodea a la noticia.

Decir que la pobreza y los llamados servicios sexuales son realidades de cualquier país es un argumento que intenta atenuar la crisis de trasfondo en Cuba, una crisis política, económica y de derechos humanos.

Sobre todo cuando el Estado ha prometido una revolución para los humildes y cada vez se aleja más de ellos.

Otro video que se hizo viral hace unos meses revela el interés de algunos turistas extranjeros por relacionarse con menores de edad.

Dos cubanas contaron su experiencia.

Entre los delitos contra el desarrollo integral de las personas menores de edad, se establece que quien utilice a una persona menor de 18 años en el ejercicio de la prostitución o en la práctica de actos de corrupción, pornográficos u otros previstos como delito incurre en sanción de privación de libertad de 7 a 15 años.

Además, dentro de los delitos contra la dignidad humana que incluyen la trata de personas, el proxenetismo y otras formas de explotación sexual, también se advierte que la sanción es de privación de libertad de 10 a 30 años o privación perpetua de libertad cuando la víctima sea una persona menor de 18 años.

Esto es lo que dice, en teoría, el Código Penal.

Sin embargo, hay una zona preocupante de desprotección social y familiar en la que ese tipo de hechos siguen ocurriendo.

En estas historias, el Estado tiene una alta cuota de responsabilidad, aunque la que asume es más represiva que profiláctica.

Y quédense con esta palabra porque es fundamental en nuestro análisis.

Por eso, comencemos con una pregunta.

¿La prostitución en general es considerada un delito en Cuba? Uno de los argumentos más repetidos por el régimen de La Habana para defender el nuevo Código Penal vigente desde 2022 fue que se eliminaban las llamadas medidas de seguridad predelictivas, conocidas popularmente como Estado Peligroso.

Durante décadas, esta figura legal sirvió como excusa para encerrar en cárceles comunes a personas que no encajaban en el ideal de lo que la propaganda llama la sociedad socialista.

Entre esas supuestas lacras sociales que debían erradicarse estaban las prostitutas, las personas sin vínculo laboral con el Estado y, por supuesto, los opositores.

Pero como no hubo eliminación de las conductas que el sistema privado