Cuenta la leyenda EL COLIBRI

En el corazón de la selva maya donde los árboles esconden secretos antiguos nace una leyenda los dioses creadores de todo lo que conocemos se reunieron con un propósito especial querían un mensajero un ser mágico que pudiera unir el cielo y la tierra imagina esto tomaron una piedra de jade verde y brillante como las hojas después de una lluvia fresca con mucho cuidado tallaron la piedra dandole la forma de una flecha símbolo de velocidad y precisión y entonces con un soplo de vida la flecha se transformó se convirtió en un pájaro pequeño delicado pintado con los colores del arcoíris había nacido el colibrí un regalo de los dioses para el mundo el colibrí con su vuelo tan veloz que apenas se puede seguir con la mirada comenzó su misión sagrada recorrió la selva los campos de maíz donde crecían las cosechas y los templos mayas llenos de misterio sus alas zumbaban como una canción antigua llevando mensajes de amor y esperanza a todos los rincones los hombres y mujeres mayas observaban al colibrí con reverencia como si fuera un mensajero del cielo veían en él un símbolo de conexión con lo divino con los dioses que vivían en las alturas le susurraban sus deseos y oraciones con la confianza de que el pequeño mensajero los llevaría a los oídos de los dioses el colibrí con su belleza y energía inagotable se convirtió en un símbolo de alegría para todos verlo revolotear entre las flores como una danza mágica era un signo de buena fortuna su presencia llenaba los corazones de esperanza y felicidad como un rayo de sol en un día nublado se decía que el colibrí traía consigo el amor como un regalo del cielo su vuelo incansable en busca del néctar más dulce era una hermosa metáfora de la búsqueda de la felicidad en el amor los dioses al crear al colibrí dejaron una advertencia que resonaba en el viento cuiden a este pequeño ser dijeron con voz poderosa su fragilidad es un recordatorio de la importancia del respeto y la armonía con la naturaleza el colibrí tan delicado como una flor punto de abrirse representaba la necesidad de cuidar el equilibrio de la vida dañar a un colibrí era una ofensa a los dioses una falta de respeto a la creación misma hasta el día de hoy la leyenda del colibrí sigue viva susurrada por el viento entre las hojas nos recuerda la importancia de nuestros sueños la conexión con lo divino y la necesidad de cuidar la naturaleza que nos rodea