Cuéntame Un Cuento: EVFDLBD 5

Cuéntame mi cuenta muy buenas a todas las personas que y cuéntame un cuento aquí en radio o registrate llegamos hasta la última parte del relato que no se ha estado ocupando estas semanas es el relato es el verdadero final de la bella durmiente escrito por ana maría matute la situación terminaba un poco tensa en el capítulo anterior por lo que ya en este fragmento que habéis escuchar a continuación se da cierre a la historia así que para entretenernos mucho y darnos post y al final de este cuento sin más dilación aquí viene el capítulo cinco del verdadero final de la bella durmiente he visto que la buhardilla contigua a la tuya sale humo puede explicarme porque si nadie vive en ella erin a era mujer que no se dejaba coger desprevenida y hacía tiempo que tenía preparada la respuesta si señora allí quemamos todos los desechos y sobras de la casa para que no molesten con solo ni su presencia vuestro paso crecen demasiadas malas hierbas y arbustos en el jardín y pienso que no deben ofender ni vuestra vista ni vuestros paseos bueno procura que todo esté bien sea doy limpio para cuando llegue mi hijo de las tierras de esos sobrino así que de momento no dio más importancia al suceso y se internó en la casa ya no era joven empezaba a resentir del reuma y las piernas le dolían tanto que no estaba su anima dispuesta a detenerse en esas cuestiones así mal que bien paso a que el invierno y un buen día volvió a florecer la primavera la nieve volvía a derretirse corrían los arroyos y brotaban los tallos verdes al borde de los manantiales poco después los cerezos y perales del jardín se cubrieron de flores blancas y rosadas cuando el viento lo estarán de ava una nube de pétalos volaba hacia las ventanas de la buhardilla y sin embargo por más que el mundo se llenará de vida y alegría que los pájaros inundan los bosques de amorosas llamadas que por sobre las montañas llegarán nubes de mariposas ellos la madrid los niños permanecían encerrados en su buhardilla sin tener siquiera derecho a asomarse a las ventanas aunque la buena erin al extra y exquisitos platos y procuraba que nada les falta se la verdad era que sus mejillas pali y que el brillo de sus ojos iba a apagándose día a día apenas tenía ganas de jugar y únicamente les atraía que el agujeritos que había dejado en los positivos un nudo de la madera o las rendijas de la ventana por donde mirar hacia afuera allí donde el mundo una vez más parecía recién nacido entonces volvieron a ver haber o y amia y al pequeño naldo y se sorprendieron de cuanto habían crecido a que el invierno aurora y día se sentían cada vez más tristes viendo como los hijos de rajoy harina se revolcaban por la hierba y cogían nueces verdes y jugaban con su perrita eran todos ellos reto saben ni jugaban alegremente bajo los árboles en la brisa de la mañana y les odian a su antojo sin tener que guardar silencio capotear en las aguas del manantial sin tener que envuelve a sus pececitos con trapos y a veces cuando apretaba el sol es veían bañarse en la cascada del manantial de