
Dante Gebel #916 Honrar la vida

Description of Dante Gebel #916 Honrar la vida
Mensaje:
Muchos fallamos la prueba de la honra, ya que tendemos a mirar a nuestro alrededor y pensar que tenemos derecho a las bendiciones de nuestra vida. ¡No nos merecemos nada de lo que nos ha sido dado! Mientras mayor sea el sentido de derecho, más pequeño será el sentido de gratitud; y sin un corazón agradecido, el alma sufre. Para superar las semillas de ingratitud y deshonra, debemos ser más conscientes de la presencia de Dios y de Su bondad. Aprendamos a honrar la vida, porque la honra estima, eleva, construye y produce agradecimiento. El agradecimiento genera adoración y el antídoto contra la ingratitud es devolver cada bendición con adoración.
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Durante los últimos 30 años, más o menos 30-35 años, yo he tenido la providencia divina y la gratificación de viajar a distintas partes del mundo, distintos países de todo el mundo, muchísimos.
Y he aprendido que cada lugar tiene su propio acervo cultural, sus tradiciones locales, sus comidas y hasta las formas apropiadas de mostrar honra.
Y de hecho, uno aprende hasta cómo se puede deshonrar a la gente.
Si uno no hace las preguntas antes de llegar, uno podría pecar de grosero por desconocer ciertos acervos culturales.
En Corea, por ejemplo, cuando conocen a alguien, es muy apropiado inclinarse, pero solo levemente, no se puede hacer así, no.
Es solo, cuando uno conoce a alguien, uno debe inclinarse.
Lo habrán visto en alguna serie coreana, Netflix, por ejemplo, ¿no? Uno no debe inclinarse de manera muy pronunciada, sino que uno se debe inclinar por debajo de la cabeza de la otra persona.
Es de mala educación dar la mano, mucho menos como los argentinos que damos besos, eso sería terrible para un coreano que invadamos su espacio personal.
Entonces ellos tienen que inclinarse así como una señal de respeto.
La profundidad de la inclinación puede variar dependiendo del estatus y la edad de la persona a la cual se dirigen.
Si la persona es muy importante o significa mucho para el otro, entonces la inclinación puede ser más acentuada, ¿no? Mayor será la inclinación.
Esto transmite respeto y además demuestra honra.
Una costumbre, estaba leyendo muy peculiar, por ejemplo, de India, Turquía y la mayor parte de Medio Oriente y China, es eructar luego de una buena comida como prueba de honra al anfitrión de que lo has disfrutado.
Yo sé que para nosotros dicen, pero no puede ser, qué asco, pero allí hay que dar un buen eructo para la señora que preparó el pollo diga, qué lindo, me salió rico.
Otra de las singularidades es quitarse el calzado al entrar a una casa, especialmente en Oriente.
Esto es una manera de dejar todas las impurezas afuera, que por cierto es una manera física de no ensuciar la casa y aparte tiene un simbolismo que lo que trajimos de afuera queda afuera, no entra dentro de la pureza de la casa.
Y la cultura coreana, por ejemplo, respeta mucho a las personas mayores, por cierto.
No importa si reciben un regaño injusto, nunca los miran a los ojos a los mayores o a la autoridad y mantienen la cabeza agachada hasta que el regaño termine.
Así son los hijos para con los padres.
El padre habla, levanta la voz y el hijo, aunque tenga 30, 40 años, baja la mirada, no lo mira a los ojos porque eso sería el símbolo de estar enfrentándolo, confrontándolo.
Bueno, y todo esto me lleva a investigar cuáles son las maneras en que los hispanos mostramos honra.
No cuenta el eructo, porque para nosotros no es una forma de mostrar honra esa.
Y la verdad es que nosotros no damos ningún tipo de importancia a ese tipo de cosas.
No encontré una sola actitud que bien pudiéramos enseñarle a un extranjero y decirle, mira, los hispanos, seamos mexicanos, salvadoreños, argentinos, colombianos, dominicanos, coincidimos en esta manera para honrar.
No.
Lo que sucede es que nuestra cultura occidental no valora las expresiones de honra del modo en que la hacen otras culturas.
Los anglos tampoco.
La palabra honrar en griego significa asignar valor, respetar, apreciar, estimar en grado sumo.
Y la palabra griega para sin honra o deshonra es tratar a alguien como común, vil, ordinario.
Entonces lo que la honra hizo grande, la deshonra, lo convierte en algo común.
Yo atesoro, no lo traje hoy, pero alguna vez lo mostré, creo que en la Catedral de Cristal.
Yo atesoro un pequeño autito de colección, así, del año 1974, que fue...