Deja de hablarte así: lo que aprendimos de Ethan Kross sobre tu mente 😳

Bienvenido, bienvenida a la teoría de la mente. ¿Cómo estás? Hemos creado este espacio en forma de conversación para aprender juntos cómo cuidarnos mejor en general y con un énfasis especial en la salud mental. Somos psicólogos, especialistas en ansiedad, con más de 25 años de experiencia. Si necesitas ayuda, puedes llamarnos al 911198157 o escribirnos a infoarrobaamadag.com.

Y no olvides visitar nuestra escuela de ansiedad. La encontrarás en escuelaansiedad.com. Allí descubrirás el espacio más completo para entender lo que te sucede y para encontrar herramientas que te ayuden a gestionar tu ansiedad. La teoría de la mente, porque cuidarnos es el primer paso para vivir mejor.

Hola y bienvenidos. Hoy vamos a meternos a fondo con esa conversación. Esa que todos tenemos aquí dentro, ¿no? En la cabeza. Esa voz interior que no calla.

Hola, sí, esa compañera constante. Pues nuestra charla de hoy se inspira mucho en las ideas y la investigación de un psicólogo, Ethan Cross, que lo explora en un trabajo llamado Cháchara. Un libro muy interesante, la verdad.

Sí. Y la idea es entender qué es esta voz, por qué a veces se nos vuelve en contra y se convierte en esa cháchara negativa que nos machaca, y sobre todo cómo manejarla, cómo sacarle partido. Vale, vamos a desgranar esto.

Es que es un tema crucial, sobre todo hoy en día. Con tanto estímulo, tanta información, la calidad de ese diálogo interno nos afecta muchísimo. Al bienestar, a cómo nos sentimos, a las decisiones, al rendimiento… Vamos, a todo. Entenderlo es clave.

Sin duda.

Todos sabemos lo que es tener esa voz en la cabeza. Es universal. Y lo que me parece increíble es la velocidad. Dicen que hablamos con nosotros mismos a un ritmo que, bueno, equivaldría a unas 4.000 palabras por minuto en voz alta.

Una barbaridad. Imagínatela de vueltas que le damos a las cosas. Y no es solo la velocidad, es que está siempre ahí, de una forma u otra. Incluso en gente con problemas de habla, o que usa lenguaje de signos… simplemente toma otras formas, ¿sabes? Signos internos, imágenes… es algo básico de la mente humana.

El propio Cross cuenta una anécdota personal, bueno, muy fuerte, que ilustra hasta dónde puede llegar esto. Por lo visto, salió un momento en la tele y recibió una carta anónima amenazante.

Uff, claro. El miedo inicial es normal, pero su voz interior se descontroló. Noches sin dormir, dándole vueltas, qué he hecho, he puesto en peligro a mi familia… Esa cháchara, como en la llama, lo secuestró totalmente durante un tiempo.

Es que esta voz, cuando funciona bien, tiene una función evolutiva súper importante.

Es la base de la introspección, ¿no? De pensar sobre nosotros, sobre lo que vivimos… Es clave para la memoria funcional, eso que llaman el bucle fonológico.

A como cuando repites un número para no olvidarlo.

Exacto, eso mismo. O unas indicaciones. Y nos ayuda a planificar, a resolver problemas, el autocontrol… Y también, muy importante, a construir nuestra historia, ¿sabes? A darle sentido a nuestra vida.

Claro, esa capacidad de viajar mentalmente. Es fascinante. Parece que el cerebro cuando está en reposo, digamos, cuando no está centrado en algo externo… El estado predeterminado, ¿sí? Pues eso, que pasa casi la mitad del tiempo no en el presente, sino repasando el pasado o imaginando el futuro, hablando consigo mismo.

Lo fascinante aquí es esa dualidad que tiene. ¿Piensas en el caso de Jill Bolt Taylor, la neuronatomista que tuvo un ictus masivo y lo contó? Sí, he oído hablar de ella.

Perdió temporalmente el lenguaje y con él su voz interior como la conocía. Y describe una experiencia paradójica. Por un lado, un alivio tremendo, una paz casi increíble, al callarse todo ese parloteo mental, la cháchara. Pero por otro lado, fue aterrador. Perdió el sentido de quién era, sus recuerdos, la conexión con su historia. Su experiencia demuestra lo esencial que es esa voz para ser quienes somos, aunque a veces nos torture.

Es nuestra mejor guía y nuestro peor crítico, todo a la vez.

Y ahí entramos en el lado oscuro, cuando deja de ser útil y se convierte en eso, en cháchara, ese bucle de poder.