Description of La del manojo de Rosas, de Pablo Sorozabal
La del manojo de rosas, Sainete lírico en dos actos, se estrenó en el Teatro Fuencarral de Madrid, el día 13 de noviembre de 1934. Sus libretistas fueron, Francisco Ramos Castro y Anselmo Cuadrado Carreño. Música de Pablo Sorozábal. Se trata de uno de los mayores éxitos de Pablo Sorozábal Una historia de amor donde el sainete se transforma en propuesta crítica desde el momento en el que la protagonista se niega a utilizar el matrimonio como vía de ascenso social. Todo ello, en un Madrid plenamente republicano en el que sus habitantes parecen tan dispuestos a sacudirse los mitos del casticismo como a bailar los ritmos llegados del otro lado del Atlántico.
La acción tiene lugar en 1934 en una plaza de barrio madrileña en la que hay un garaje, un bar y una tienda de flores llamada «La del manojo de rosas». Allí están JOAQUÍN, el oficial mecánico del garaje con su aprendiz CAPÓ. También DON DANIEL, el dueño de la tienda de flores, con su hija ASCENSIÓN, la florista (muchacha madrileña de educación esmerada, pero orgullosa de su origen obrero, por lo que no quiere oír hablar de amores más que con un hombre de su clase), y el camarero del bar, ESPASA. Don Daniel quiere que su hija acepte la proposición de RICARDO, un joven aviador, pero Ascensión a quien quiere es a Joaquín. También hay otro conflicto amoroso entre CLARITA, una coqueta y culta manicura, Capó y Espasa.
Con esta obra se consagró definitivamente el maestro Sorozábal como compositor; en ella supo reflejar el ambiente del Madrid de la época del estreno, conjugando sabiamente los ritmos tradicionales del sainete, como el pasodoble, la mazurca o el chotis, con otros como el fox trot o la farruca, dándole un nuevo carácter y sentido, más cercano a la modernidad, e incluso a la opereta; el propio compositor había tratado de buscar nuevos medios e incluso, por ejemplo, dotar a los números musicales de cierto sentido bailable.
Dentro del apartado del texto, aunque continúa en la línea tradicional del sainete madrileño, se encuentran nuevas situaciones y personajes tales como la señorita venida a menos, el ridículo Don Juan de barrio, o el camarero hiperbólico. Como es habitual en muchas obras del género, predomina la trama sentimental, pero se pueden apreciar ciertas pinceladas de conciencia social, reflejando el ambiente del momento.