EL DEPORTIVO TIEMPO EXTRA 280425

El Deportivo. Tiempo Extra. Ismael Lugo.

¿Qué tal? Buenas tardes. Son las 8 y 5 minutos en Canarias.

La noticia del día está en el apagón general sufrido en gran parte de la península y que también ha afectado al mundo del deporte.

Ya es que el partido de la jornada 37 en segunda división entre el Almería y el Racing Club de Ferrol, previsto para las 7 y media, ha sido suspendido tras la decisión consensuada entre clubes, la liga, árbitros y la subdelegación del gobierno debido a que no se podía garantizar del todo el suministro eléctrico durante la totalidad del transcurso del partido, así como la propia comunicación con la sala VOR en Las Rosas.

En lo que respecta a nuestros equipos, el Club Deportivo Tenerife se queda al borde del descenso tras un nuevo empate y una nueva polémica arbitral.

Y en primera división, la Unión Deportiva Las Palmas ha regresado esta tarde a los entrenamientos en Barranco Seco para afrontar el tramo decisivo de la temporada con el partido ante el Valencia como el primer reto.

Y en baloncesto, la Laguna Tenerife y el Dreamland Gran Canaria sumaron victorias importantes en su lucha por consolidarse en los puestos de privilegio de la Liga Endesa.

En la Radio Canaria, El Deportivo. Tiempo Extra. Ismael Lugo.

Y empezamos con segunda división, porque el Club Deportivo Tenerife empató a uno ante el Eibar en el Heliodoro Rodríguez López, que supone el tercer empate consecutivo y que mantiene al equipo al borde del abismo.

Sigue a ocho puntos de la salvación, a falta de quince por disputarse, aunque teniendo el gol a Beraz, perdido tanto con el Zaragoza, que es el equipo que marca la salvación, como con el eldense.

En realidad, la desventaja sería con nueve respecto a la salvación.

Un empate ante el Eibar que, como viene siendo habitual en las últimas jornadas, también volvió a estar marcado por las decisiones arbitrales.

El conjunto blanqueazul sigue pagando sus propios errores, pero también los reiterados atropellos que sufre jornada tras jornada.

Ayer, el colegiado no señaló un penalti sobre Bodiger y anuló un gol totalmente legal a Michael Mesa por una falta que muy pocos vieron.

Una masacre arbitral que deja al Tenerife al borde del abismo.

Escuchamos a su entrenador, a Álvaro Cervera.

Puedes anular el gol.

Puedes ir al VAR a verlo.

A nosotros no nos está permitido que se vaya al VAR.

Puedes mirarlo en el VAR y después decir, sí, mira...

No, no, es que ni eso.

Entonces, de verdad que me dan ganas de decir muchas cosas.

Muchas, pero sé que no voy a ningún sitio, entonces me callo.

Se intentaba morder la lengua al entrenador blanqueazul, pero finalmente no pudo ocultar la indignación que se vivió en el vestuario.

Indignados. Hoy están indignados.

Hoy he pasado por el vestuario, porque es mi obligación, cuando se gana, cuando se pierde, y no estaban hablando del partido. Están indignados.

Esta es la palabra, indignados, porque seguramente el equipo ha hecho una temporada para estar donde hay futbolísticamente.

Hemos tenido fallos, igual que todo el mundo, pero son muchas cosas y muy seguidas.

A pesar de ello, Álvaro Cervera quiso poner en valor el esfuerzo de sus futbolistas a lo largo del partido.

El equipo se ha esforzado, el equipo lo está intentando, el equipo está jugando y se está manejando como si no estuviese la clasificación en la que está.

Hacemos todo lo posible, sé que tenemos carencias, y luego en todos los partidos pasa algo.

No merecen ni nuestra duda. Ya está, está ahí y se acabó.

Que lo expliquen ellos si quieren explicarlo, y si no, pues no da igual.

Un esfuerzo que no fue suficiente para evitar seguir alejándose de la permanencia.

El propio técnico reconocía que la salvación cada vez se ve más lejana.

Hemos tenido dos o tres, hemos conseguido empatar, ahí ellos luego se han soltado un poco, pero lo hemos intentado, ya digo, sin la brillanteza a lo mejor de otras veces.

Lo intentamos todo, no se puede reprochar nada, pero cada día está más difícil.

Y ya solo nos queda ganarlo todo hasta el final.

Una tarde muy dura también para los jugadores, que no escondieron su frustración tras el partido.

Y es que Michael Mesa, autor del gol anulado, explicaba cómo vivió esa situación que hubiera cambiado el partido.

Yo no hablo con él porque directamente me voy al mediocampo porque sabía que tenía que ser gol, que lo iban a acabar dando.

Pero bueno, para sorpresa de todos, no va a revisar la albar y mantiene su decisión de qué se supone que falta.

Cuando en ningún momento, ya visto por todo, se ha visto que hay falta.

Minuto 66, empatamos el partido, creo que era el mejor momento en el que estábamos.