Derroteros: Extinción, con Sabina Urraca (CARNE CRUDA EXTRA)

Adiós, Eva.

Hasta el lunes, buen finde.

Igualmente.

Derrotero.

Pásalo bien.

Conjunto de datos que indican el camino para llegar a un lugar.

Bueno, ¿qué? ¿Nos vamos? Dirección que se da por escrito para un viaje.

Paseis, buen finde.

Libro que contiene un derrotero.

Hasta luego.

Línea marcada en el mapa de mareas para guiar a los pilotos.

Derrota.

Derroteros.

Derroteros.

Derroteros.

Pensar paseando con Sabina Urraca.

¿Qué tal, Sabina? ¿Cómo estás? Pues bien, bien, bien.

¿Has podido descansar las vacaciones? Sí, bastante, la verdad, sí, sí.

Porque estaba a punto de extinguirme.

Creo que es precisamente de lo que te quería hablar hoy.

¿No será por la extinción del Papa? No, porque el Papa como figura creo que no se va a extinguir, tristemente.

Solo ha muerto Francisco.

Podemos decir, ha muerto Francisco.

¿Ha muerto Paco? Ha muerto Paco.

¿Otro Paco? Sí, exacto.

¿Por qué quieres hablar de la extinción? Bueno, porque es un fenómeno que me fascina.

O sea, espérame un momento.

Pero la podredumbre, la extinción, todo lo que se está haciendo, lo que se está deshaciendo, lo que se está muriendo, es lo que te interesa.

Es lo que me interesa.

Claramente, sí.

Debo decir que aquí tengo como una visión más conectada con lo mágico e incluso con lo fantasioso.

Me he dado cuenta, me he puesto a investigar un poco dentro de mi cabeza por qué me interesan desde siempre los animales extintos.

Y por qué nos interesan en general estos fenómenos de desextinción que se están viendo últimamente.

Ah, es verdad.

De a ser los grandes lobos gigantes que se supone que han desextinguido.

Ahora hablaremos de esto y por qué no es verdad.

Si alguien no se ha enterado, supuestamente han encontrado ese código genético y a través de ese código han podido rehacer una especie extinguida.

Bueno, entre comillas.

En realidad es algo estético.

Han conseguido estéticamente algo que se parece mucho a un lobo gigante.

De hecho, han salido en la revista Time, han hecho una súper portada.

Pero obviamente yo veo como eso me arrastra absolutamente a la fantasía y entonces me puse a pensar sobre la extinción.

Que la extinción es la desaparición de todos los miembros de una especie.

Se considera extinta cuando muere el último miembro de esa especie.

Hay un fenómeno muy curioso que se llama Taxón Lázaro, que es el fenómeno en el que una especie que se creía extinta de pronto reaparece abruptamente.

Resucita.

Resucita.

Como Lázaro.

No resucita.

Exacto, por eso se llama Taxón Lázaro.

No resucita, como es el caso del Colossus, que es esta empresa que está intentando rehacer, resucitar a estos animales, sino que lo que me parece bonito es creer que estaba extinta esa especie y de pronto que veinte años después, ah no, la rana dorada peruana no estaba.

Quedaba una.

Quedaba una, de pronto se descubre una.

Es decir, no podemos controlar absolutamente todo el territorio del planeta, aunque nos creamos que sí.

Esta idea, y ahí conecta con lo fantasioso y con la idea de fe, que es algo que yo creo que solo tengo en estas cuestiones.

En estas cuestiones animales, de la extinción.

Creo que es lo más parecido a lo religioso, al sentimiento religioso que yo puedo llegar a comprender.

Es muy curioso porque luego hay especies que se llaman fósiles vivientes porque sobreviven sin cambios, han sobrevivido sin cambios durante cientos de millones de años.

A pesar de que la extinción es un fenómeno en realidad natural, es verdad que hay determinadas cuestiones que precipitan la extinción, pero es muy fuerte porque cerca de un 99,9% de todas las especies que alguna vez existieron están actualmente extintas.

Es decir, hay una renovación constante como de especies y obviamente hay un montón de factores que afectan a determinadas especies.

Hay determinadas cadenas de extinción que hacen que si una especie se extingue, otra que depende de ella se extinga y así sucesivamente.

Pero de alguna forma están constantemente extinguiéndose sin que nos demos cuenta muchas especies.

Y millones de especies que nunca llegamos a conocer existieron en un momento y desaparecieron.

O sea, solo están en realidad con vida durante un mismo periodo un 0,1% de las especies y el 99,9% restante ya ha existido y ha desaparecido.

Esto me sobrecoge en este tipo de cifras.

De hecho, para el año 2100 se cree que podrían desaparecer la mitad de todas las especies que existen actualmente.

Esto es muy curioso.

Es verdad que nos estamos cargando el planeta.

No nos olvidemos de este pequeño detalle que voy a mencionar.

Por supuesto, actualmente hay muchas organizaciones ambientalistas y gobiernos que se preocupan por esta extinción de las especies.