Desde la Presidencia: «Los médicos cubanos son orgullo de la nación»

¿Qué tienen las brigadas médicas cubanas que molestan tanto al gobierno norteamericano? Ese interrogante fue el hilo conductor de un nuevo episodio del POSCAT desde la Presidencia, que conduce el primer secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz Canel Bermúdez.

Están apuntando a la exportación de los servicios médicos conscientes de que la formación y el entrenamiento de personal de salud es una fortaleza de la sociedad cubana.

Minar o intentar contaminar medios tradicionales y redes sociales con esos mensajes es solo una parte del cínico plan que la ultraderecha de origen cubano ha concebido.

Así que no venimos aquí a dar explicaciones a quienes no la merecen.

Venimos a decir la verdad que quieren sepultar bajo una campaña mendaza.

En este espacio desde el Palacio de la Revolución, el mandatario y sus invitados desmontaron con sólidos argumentos la campaña de odio y mentiras que mueve el ataque indudablemente quirúrgico contra la salud pública cubana y en particular contra la exportación de servicios médicos.

No hay dudas de que esa campaña desesperada por bloquear la cooperación cubana tiene dos propósitos claros. Cerrar cualquier vía de acceso de ingresos al país hacen una actividad tan noble y necesaria para otras naciones como son los servicios de salud. La otra razón es política e ideológica. Quieren barrer con el ejemplo de Cuba. Valoraciones sobre este asunto las ofrece el doctor José Ángel Portal Miranda, ministro de Salud Pública.

Yo creo que hay dos temas principales que tienen muy molesto al gobierno estadounidense.

En primer lugar, el hecho indiscutible del reconocimiento internacional que tienen nuestros colaboradores por lo que han logrado transmitirle al mundo en materia de solidaridad, en lograr la verdadera salud para los pueblos. En segundo lugar, tiene que ver con el reconocimiento de que también la cooperación internacional puede aportar a la sostenibilidad a los servicios de salud en Cuba. Servicios de salud que en Cuba son gratuitos pero que realmente le cuestan al Estado.

¿En qué se usan los ingresos que el país recibe por sus servicios médicos? ¿Por qué la campaña anticubana que pretende mostrar a los profesionales de la salud como esclavos y a este humanista y solidario programa como trata de personas? ¿Cómo se integran las brigadas? ¿Cómo se establecen los contratos? ¿Y qué significa para los colaboradores saber que están aportando al país acompañado, por supuesto, del crecimiento profesional y el bienestar de su familia? Sobre estos y otros temas también se reflexiona en este post que contó con la presencia del doctor Carlos Ricardo Pérez, actual secretario general de la Cruz Roja Cubana, que ya ha cumplido varias misiones como miembro de las brigadas médicas en diferentes países del mundo.

Yo creo que también es importante precisar que cuando vamos en las brigadas a los países no vamos a difundir ninguna ideología, no vamos a hacer proselitismo político. Yo creo que hemos sido bastante respetuosos, neutrales y que además hemos sido imparciales en el tratamiento a las personas. Nosotros hemos estado en lugares difíciles, hemos aplicado el método clínico, hemos cumplido con principios éticos de nunca lucrar con la salud de la gente. El común denominador es la satisfacción del pueblo. ¿Cómo hacemos ese trabajo? Y yo creo que eso es lo fundamental, el compromiso con nuestra profesión, con salvar vidas.

Algo que decía el doctor Carlos y tiene que ver con la voluntariedad de nuestros cooperantes, porque es una de las matrices de opinión es que van engañados, obligados y que si no hay represalia con ellos, con la familia, lo cual es totalmente falso. Hay un programa para que nuestros trabajadores puedan optar por cumplir misiones y hay un proceso de preparación. Desde mayo de 1963 en Argelia, que marca el inicio oficial de la colaboración médica cubana en el mundo, hasta la fecha más de 600.000 cooperantes han brindado sus servicios en 165 naciones. En la actualidad más de 24.000 colaboradores se encuentran en 56 países ofreciendo su humanismo y solidaridad.

De la inmensa obra creada por el comandante en jefe Fidel Castro para la formación de profesionales en Cuba también se habló en este episodio del podcast desde la presidencia. Desde Tegucigalpa a través de videoconferencias transmitió un mensaje cargado de emociones el doctor Luther Castillo Harry, secretario de Estado en el despacho de Ciencia y Tecnología de la República de Honduras. Pero Luther no habló como un alto funcionario del gobierno de la hermana nación centroamericana, lo hizo como el humilde Garifuna que en marzo de 1999 llegó a Havana cargado de sueños comprometido con la triste realidad de su vida.