DEx 09x06 GEMELOS: CONEXIONES IMPOSIBLES

Hola amigos, hola amigas. Bienvenidos una semana más a nuestra cita en estos días extraños.

Antes de meternos en harina con los temas de hoy, necesito compartir con vosotros algo que lleva rondándome la cabeza toda la semana. Ya sabéis que en este programa hablamos de lo extraño, de lo inexplicable, de lo que nos incomoda, pero a veces lo más perturbador no viene del espacio exterior ni de las casas encantadas. A veces viene de algo mucho más cercano, viene de nosotros mismos. Esta semana, navegando por ese océano de perplejidad que son las redes sociales, me topé con un vídeo que me dejó con esa sensación de vértigo que sientes cuando uno mira demasiado tiempo al abismo.

Ojo no, no voy a juzgar a nadie, que conste. No estoy aquí para eso. No siendo cristiano, lo de quien esté libre de pecado que tire la primera piedra es algo que llevo a rajatabla. Pero sí quiero reflexionar sobre lo que vi y sobre lo que oí. Una chica joven que se gana la vida subiendo contenido a OnlyFan, y oye, cada uno se busca las habichuelas como puede en estos días extraños, daba a entender bastante a las claras con una naturalidad que llamaba la atención, que como parte de ese contenido, había mantenido relaciones sexuales con su propio padre.

Sí, ya sé que algunos estaréis pensando que es mentira, que es clickbait, que es una estrategia de marketing perversa. Oye, y ojalá fuera así. Pero incluso si lo fuera, el simple hecho de que alguien considere que eso puede ser una estrategia comercial, ojo, eso ya dice mucho sobre el momento que vivimos. Pero no es sobre ella, sobre quien quiero hablar, ni sobre su padre.

Bueno, sobre su padre a lo mejor tangencialmente, porque como os decía, no estoy aquí para juzgar a nadie, que cada uno viva su vida como Dios le dé a entender Lo que me inquieta, lo que me ha dejado pensando y dándole vueltas al asunto, y bueno, ya sabéis que a mí me cuesta poco darle vueltas a algún asunto, es una reflexión más profunda que surgió de ese encuentro digital.

¿Sabéis qué es lo que realmente me perturba? La idea de que la esencia de la fibra moral de un ser humano no está solo en lo que hace, o en lo que deja de hacer, que también, sino en lo que haría o dejaría de hacer, si no hubiera consecuencias. Si nadie mirara, si nadie juzgara, si no hubiera castigo, si no hubiera recriminación, si no hubiera reprobación y por supuesto si no existiera el código penal.

Pensadlo un momento. ¿Cuántas veces al día las personas, puede que nosotros mismos, se contienen no por convicción moral, sino por miedo a las consecuencias? El que no roba en el supermercado porque hay cámaras. El que no dice lo que realmente piensa en una reunión por miedo a perder el trabajo. Ese vecino modélico que nos saluda amablemente cada mañana y que a lo mejor en su fuero interno le gustaría hacer algo inimaginable. Si pudiéramos, y perdonadme la metáfora mecánica, si pudiéramos mirar bajo el capó de muchos cerebros, ¿qué encontraríamos?