Domina la psicología de la venta en 4 pasos (funciona hoy mismo)

Hola, emprendedores y emprendedoras en la vida, soy Juan Merodio. Si crees que vender
es cuestión de tener labia, convencer al cliente o aplicar trucos psicológicos baratos, déjame
decirte que te han engañado. Hoy te voy a hablar de un modelo brutalmente efectivo para
cerrar clientes sin rogarles, sin perder tu dignidad y sin manipular a nadie.
Puedo decirte que llevo dedicándome al mundo de las ventas desde hace más de 20 años
y dices, bueno Juan, marketing ventas es parte del mismo embudo. De hecho, mis primeros trabajos
fueron vender a puerta fría y vender por teléfono seguros de vida. ¿Hay algo más
difícil que eso? De hecho, recomendaría a todo el mundo hacer cursos de venta, que
por cierto, en TecDi tenemos cursos de venta. Y hablando de TecDi, ¿quieres hacer crecer
tu negocio en solo 3 meses? Te acompañamos y te ayudamos a mejorar los resultados del
negocio utilizando el marketing digital y la inteligencia artificial. Para ello, agenda
una llamada conmigo, así puedo conocer dónde estás, dónde quieres llegar y comentarte
cómo nuestro plan intensivo de 3 meses te va a llevar de 0 a 100 como nunca antes lo
has hecho. Reserva ahora mismo una llamada sin compromiso
y hablamos sobre tu situación y sobre los planes de TecDi. Estamos en el episodio 882
y hoy es miércoles 5 de febrero de 2025. Durante años nos han vendido la idea de que
la clave de las ventas está en saber hablar mucho, hablar bien, convencer al cliente con
un discurso perfecto o en aplicar tácticas de persuasión muy agresiva. Esto es una mentira
enorme. La verdad es que si necesitas convencer a alguien de que compre, ya has perdido la
venta antes de empezar. Las ventas que realmente funcionan se cierran
antes de llegar al cliente. Y créeme, este proceso es aplicable a la parte presencial
y digital. Si te grabas esto a fuego, vas a ganar más dinero sin esfuerzo innecesario.
Si no lo entiendes, vas a seguir peleando con cada cliente como si estuvieses en un ring
de boxeo. Así que presta atención a este podcast porque lo que voy a compartir contigo
puede ayudarte muchísimo. Tenemos claro que las ventas no son cuestión
de suerte, tampoco de discursos bonitos. Los negocios que venden sin esfuerzo aplican un
proceso claro y predecible. Y te voy a hablar de cuatro etapas que te van a ayudar a convertir
mucho mejor. La primera es el impacto inicial. ¿Cuál
es el error de los vendedores mediocres? Que arrancan con discursos aburridos, con presentaciones
largas o directamente suenan desesperados. ¿Te resuena esto? Es decir, típica persona
que de repente te está intentando contratar. Al final venden menos, ¿no? Se le nota desesperado.
O alguien que para explicarte algo se tira 10 minutos. ¿No? Fíjate, alguna persona que te
dice que te lo tiene que contar menos de 10 minutos, no te puedo contar todo. Es que no tienes
que contarme todo. Al final, una buena venta se basa en dejar a la otra parte con ganas de saber
más. Es más, cuando cuentas muchas cosas, ¿sabes qué es lo que sucede? Que la otra persona no se
queda con las importantes. Entonces, esto es como un titular. Dale cuatro datos para que se le quede
en la mente lo que necesitas o lo que quieres que se le quede y se quede con ganas de más.
Por lo que, muchas veces, cuando intentamos contar todo porque pensamos que es mejor y nos
sale esa parte emocional de, bueno, es que tienen que saber todo de nuestra empresa,
de nuestro producto, de nuestro servicio. ¡Error! Y esto pasa en el discurso verbal,
pero también te decía en el mundo digital. Una web, ¿qué sucede? Muchas empresas dicen,
bueno, es que tenemos que contar todo de nuestra empresa, todo de nuestro producto. Y ponen una
web sobrecargada de textos para contar todo. ¡Error! No tienes que contar todo. Lo primero
porque sabemos que en Internet no vamos a leer todo. Por lo tanto, lo que estás haciendo es
dispersar al usuario. Recuerda esta frase, que seguro que la has oído, mente confundida no
compra. ¿Qué es lo que realmente funciona? Captar la atención en segundos, sin rodeos. Eliminar el
miedo del cliente a ser manipulado. Ese miedo a, me estaré equivocando, no quiero tomar una decisión
en caliente. Y dejar claro qué pasará en la conversación. Déjame ponerte un mal y un buen
ejemplo. Mal ejemplo. Hola, mi nombre es Juan y quiero hablarte de nuestro increíble servicio
que ha ganado múltiples premios. ¿Cuál sería un buen ejemplo? Te voy a mostrar en 3 minutos cómo
puedes duplicar tus clientes sin gastar más en publicidad. ¿Te interesa? Si en los primeros 30
segundos no generas confianza, lo que digas después no importa. Segunda fase, descubrir
lo que el cliente quiere de verdad. Un error clásico son los vendedores preguntando cuál es
tu presupuesto o qué necesita.