EDITORIAL ÁLEX GOMAR 1/10/25 - Derrota del Valencia ante el Oviedo

Hoy, en este día de preocupación, día de enfado, principalmente en el Valencia, porque las cosas en Mestalla no están funcionando.

El Valencia cayó anoche en Mestalla por un gol a dos ante el Oviedo, en un partido donde el Valencia tenía la obligación de sacar los tres puntos.

Punto número uno, por la superioridad en cuanto a plantilla del Valencia.

Punto número dos, porque el Oviedo era, hasta la fecha, el peor equipo como visitante de toda la liga.

Y punto número tres, porque en Mestalla, sacar los tres puntos en este tipo de contextos, en este tipo de partidos, es obligatorio.

El Valencia anoche decidió volver a hacer el ridículo una vez más, a hacer otro partido lamentable de todo el equipo y de ver cómo un equipo como el Real Oviedo te saca los tres puntos en Mestalla.

Resumiendo el partido, Corberán salió con Julen bajo palos en defensa para Fulquier, Tárrega, Diakaví y Gaya.

Santa María y Javi Guerra en el medio, con Almeida por delante y arriba con Rioja, con Danyuma y con Hugo Duro.

Se adelantó el Valencia muy prontito, tras un centro de Rioja que remata a Danyuma a gol, marca el primero del partido, pero a partir de ahí, el Valencia desapareció.

Volvió a pasar lo mismo que en Cornella, el Valencia se adelanta en el marcador y se echa atrás como un equipo cagón.

Enseguida doy mi opinión de todo esto.

Antes, vamos a continuar con el resumen.

Un Valencia que, como digo, se marchó al descanso con ese 1-0.

Te marchas, hay que decir, por delante del marcador al descanso porque al Oviedo le falta mucho gol.

Y ya nos metemos en la segunda parte.

Penalti a favor del Valencia, penalti cometido sobre Mukhtar Diakaví.

Ahora escucharemos a Danyuma decir que fue el propio Pepelu el que le da el balón a Danyuma y le dice «toma, tíralo tú», y Danyuma termina fallando el penalti o, mejor dicho, se lo adivina el portero, se lo adivina Aaron Scandey.

A partir de ahí, el Valencia pudo haberse puesto con ese 2-0, se llega a meter el penalti a Danyuma y ya sentenciar el partido, pero se mete atrás, empieza a defender, se empieza a olvidar de jugar y en el minuto 84 un córner mal defendido porque no sé qué narices hace Gaia defendiendo a Rondón, un tío de metro noventa, termina rematando Rondón, el balón queda muerto y termina marcando Illich para empatar el partido.

1-1, saca el Valencia de centro, jugada por la izquierda, la pierde Gaia y a la contra, balón en largo para Rondón, una acción desafortunada porque dispara a Rondón, le pega a Tárrega, Julen no llega a tapar y, pam, terremonta el Oviedo en dos minutos.

En dos minutos, el Valencia pasó del 1-0 al 1-2 ante el Oviedo en Mestalla.

Este ha sido, este fue el resumen del partido de anoche.

Antes de dar mi opinión, quiero escuchar a Carlos Ruaberán en sala de prensa bastante enfadado, el técnico del Valencia.

Es difícil generalizarte y es necesario individualizarlo.

¿Por qué hemos perdido la posición en el mediocampo? ¿Por qué no hemos atacado los espacios que tenemos que atacar? ¿Por qué no hemos dado continuidad a la idea que también estaba funcionando en los primeros minutos? Es el dolor de no haberlo aprovechado, el dolor de habernos desajustado.

Ahora no es una cuestión de decirte que hay que analizar y hay que ver, lo que ha pasado está claro, lo que no podemos hacer es hacerlo si queremos ser un equipo más competitivo porque el dolor es enorme.

Porque en un partido con la lluvia, con un partido siendo por la noche, cambiándolo el martes, vienes aquí a Mestalla y hay más de 40.000 personas.

Y eso nos jode una barbaridad.

Y es doloroso.

Y ante eso ya no es una cuestión de análisis táctico, es una cuestión de que tenemos que competir mejor, darle más continuidad, estar más organizados y encaminar y dirigir un partido como tenemos que hacerlo.

Yo escucho que Ruaberán jodido.

Dice que estamos jodidos, habla de que no quiere generalizar, quiere individualizar, algo que hasta el momento nunca había ocurrido.

Siempre ha hablado de Ruaberán de hablar en lo colectivo, nunca ha hablado de nombres propios.

Ayer, por primera vez, habla de nombres propios.

Enseguida lo analizaremos.

Periódico Valencia, 1-2 en Mestalla ante el Oviedo y una situación ahora mismo que no es que esté empezando a ser vergonzosa, es que ya es vergonzosa desde hace semanas.

Yo ayer salí muy cabreado de Mestalla porque este Valencia es un equipo muerto, es un equipo sin vida, es un equipo que no juega a nada, que no le compite a nadie y que no se sabe lo que juega.

Señores, llevamos siete partidos de Liga y yo no sé a qué juega el Valencia.

Anoche el equipo sale bien, se adelanta en el marcador, pero el equipo se echa atrás como un equipo cagón.

¿Por qué narices el Valencia se mete atrás a defender con todo el partido por delante? Ahí el Valencia es el único culpable de que el Oviedo terremonte.

Ahí eres el Valencia, el que le da esperanzas y el que le da vida al Oviedo.

O sea, ¿en qué momento se ha normalizado que el Oviedo te gane uno o dos en Mestalla?